Masa quebrada: Podéis hacerla vosotros mismos sin dificultad, mezclando 200 gr de harina, 100 gr de mantequilla en pomada, 1 huevo y una pizca de sal. Una vez mezclados los ingredientes, los amasamos un poco, sin trabajar mucho y guardamos la bola resultante protegida con film de cocina, en la nevera durante una hora. Una vez pasado ese tiempo forramos los moldes para hacer las tartaletas y pinchamos el fondo con un tenedor. 5 minutos al horno a unos 180º para este tamaño, es suficiente. Podéis cocerlas tapadas con papel de aluminio, con unos garbanzos o judías colocados encima, para evitar que suba la masa, y ya estamos listos para continuar.Si no queréis hacer la masa vosotros mismos, también podéis usar la masa para tartaletas de La Cocinera que da muy buen resultado, o comprar masa quebrada en vuestro supermercado.
Relleno: Mezclamos en un bol el queso la nata y los huevos, y guardamos esa masa para luego, montar la quiche. Añadir sal, pimienta y, si os gusta como a nosotros, un poco de nuez moscada.Montaje: Lo podéis ver paso a paso en la foto superior: Sobre el fondo de las tartaletas, repartimos la mitad del bacon y adornamos con las tiritas de bacon que hemos reservado. Y al horno.Lo tendremos a unos 200º y cuando podamos meter una brocheta, o una aguja de hacer punto y salga limpia, es que ya está listo. (Más o menos 15 minutos, dependiendo de cada horno)
Notas y Truquis: Esta quiche no es una quiche lorraine, puesto que lleva otros ingredientes adicionales. Por eso hablamos simplemente de quiche. Este plato, se puede dejar enfriar para comer, aunque a mi me gusta mucho más disfrutarla en templada o caliente.
Para aromatizar y darle un toque original, podéis picar muy muy finita una hojita de hierbabuena y mezclarla con los huevos y la nata al hacer la masa de relleno y vuestra quiche, tendrá un frescor “diferente”.
Con esta receta, quiero participar (aunque sea el último día) en el Concurso Deliciosa Martha, organizado por la Mambalina de recetas de cocina francesa.
Y atentos al domingo por la mañana… habrá propuestas para acabar con la Naranja Mecánica de Holanda. Después del Pulpo Paul que disfrutamos en Tortilla á Feira, contra Alemania, ahora probaremos cómo comernos a Holanda. Solo os doy un dato... No es temporada de naranjas. Y eso le conviene a la selección.
Sed felices.
Un saludo del Futuro Bloguero desde www.lazyblog.net