Volvemos a la carga después del descanso vacacional. Esta entrada sobre la serie de mitos alimentarios es un poco especial ya que no trataremos concretamente una creencia alimentaria errónea, sino que hablaremos sobre algunos de los argumentos más típicos que se usan para justificar un estado de sobrepeso. Hablaremos de los cuatro discursos más usados y veremos que en la mayoría de casos solo se tratan de exculpaciones.
Mi sobrepeso es debido a la genética/herencia
Es obvio que la genética ejerce un papel fundamental en todos nosotros. No obstante, los casos de obesidad que se pueden explicar por pequeñas mutaciones genéticas solo llegan al 5%. Existen, por otro lado, graves alteraciones genéticas que dan como resultado unas enfermedades las cuales tienen asociada una mayor incidencia de obesidad. Sin embargo, y afortunadamente, estos síndromes son muy escasos.
Por otro lado, el hecho de que padres obesos tengan hijos obesos, se explica más por una transmisión de hábitos insalubres y sedentarismo que por causa de la herencia genética.
Engordo con facilidad porqué tengo hipotiroidismo
El hipotiroidismo es una afección en la que la glándula tiroides (situada en el cuello) no produce suficiente hormona tiroidea. Efectivamente, la falta de esta hormona hace, entre otras cosas, que el metabolismo sea más lento y esto causa aumento de peso. Ahora bien, la incidencia de hipotiroidismo en la población es solo de un 3% y solo un médico puede diagnosticarla, con lo cual no vale como explicación para el sobrepeso.
Gano peso fácilmente porqué tengo un metabolismo muy lento
Es evidente que el metabolismo es muy diferente según el individuo y varia enormemente según las características personales. Sin embargo, generalmente cuantos más quilos posea una persona mayor es su gasto metabólico, ya que necesita más energía para realizar sus funciones vitales y moverse.
Tengo sobrepeso porqué retengo muchos líquidos
Generalmente el exceso de peso se debe a un exceso de grasa y no a líquidos retenidos. La retención de líquidos solo aparece en determinadas situaciones fisiológicas (embarazo, menopausia, periodo premenstrual, sedentarismo, etc.) y en muchas enfermedades (cardíacas, renales, hepáticas, inflamaciones, etc.). Además este problema siempre se manifiesta como una hinchazón de los tejidos blandos, debido a la acumulación de líquidos (muy típicamente observado en tobillos). El hecho de usar diuréticos sin control médico, pensando erróneamente en la presencia de retención de líquidos, puede resultar muy dañino para nuestra salud.
Con esta entrada he pretendido ilustrar que la mayoría de causas que se usan para justificar popularmente el sobrepeso no son válidas, o son muy excepcionales. Las causas que sí están bien definidas como causantes de sobrepeso son la ingestión excesiva de productos grasos y azucarados, y la falta de alimentos vegetales y de ejercicio físico.
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