Y puede que tenga razón. Que esa voz grave que acompaña su cuerpo dotado de generosas curvas incremente una sensualidad evidente. “Queríamos a alguien que sedujera espontáneamente, que provocara deseo y admiración en los demás. Fijamos nuestras miradas en ella y caímos en una especie de trance, ella era la imagen que representa la mujer que toda mujer quiere ser”, afirmaron Domenico Dolce y Stefano Gabbana cuando la eligieron como embajadora de su línea de maquillaje.
Ecologista, poseedora de un particular sentido del humor –Chris Evans afirmó a Vogue USA que “si tuvieras que hacer un viaje por carretera, definitivamente siempre llevarías a Scarlett en tu coche"–, amante de la estética de los 40 y de la belleza de Judy Garland, Rita Hayworth y Lauren Bacall, Scarlett es, por derecho propio, una de las musas a la que las féminas con mayor ahínco invocamos. Su rouge de labios, su melena, su manicura…el maquillaje la adora y ella adora el maquillaje. “Significa mucho para mí. Siempre me ha encantado maquillarme y creo que en gran parte se deba a contemplar a mi madre en su tocador cuando yo era niña. La veía transformarse del día a la noche y pensaba que ella era la mujer más hermosa que jamás había visto. ¡Toda mujer puede sentirse como una diva cada día por el simple hecho de aplicarse una barra de labios en color rojo!", afirma la actriz, que se compró su primer lipstick con tan sólo once años. Recuerdos de infancia, el regalo que nunca olvidará, el look con el que recibirá el 2013… Una inspiradora conversación sobre Navidad con la musa de Dolce & Gabbana. Fuente:Ana Morales para Vogue.es Sigue la Moda y Tendencia mundial en http://www.modaencordoba.com