Monitor - despertador

Por Marta Quilez @trabajoSocialMQ
El otro dia me estaba acordando de mi paso como monitor-despertador, allá en el año 2008 cuando estaba trabajando en servicios sociales municipales como trabajadora social. Me propusieron si por las mañanas queria hacer de monitor- despertador de una niña de doce años, el problema es que su cultura no entendia la necesidad de ir al colegio.
Mi tarea era ir a recogerla sobre las ocho y algo de la mañana para que entrara al cole a las nueve y que no faltase a clase, ya que su nivel de absentismo escolar era realmente alarmante.
Recuerdo con mucho cariño esos meses ya que no tuve ningún conflicto con ella, era bastante obediente y aunque no estaba de acuerdo en tener que ir al colegio, puesto que siempre iba refunfuñando, no tuve grandes conflictos con ella, y menos aún con la familia que se mostró de lo más participativa, a pesar que las hermanas mayores tampoco habian ido a la escuela.
Si es cierto que uno o dos dias si que se resistió completamente a ir al colegio, aunque fueron dias aislados, y lo importante era ver el gran progreso que habiamos hecho, de no ir nunca al cole por voluntad propia a ir de repente todos los dias aunque fuese con un monitor-despertador que era yo. Aunque hablamos de una niña de doce años he de matizar que bien podia pasar por una adolescente de casi 17 años bien por la altura y hechuras, era mucho más alta y corpulenta que sus padres.
Este periodo fue curioso porque aprendí de ella cosas que no esperaba aprender, incluso me enseñó a vivir la vida desde un punto de vista que yo ignoraba totalmente y si bien te quedas pensando era una forma de vivir y supervivir dignamente al fin y al cabo. Ella solo queria trabajar en el puesto familiar del mercado, lo único que le hacia falta saber contar para el tema del dinero y poco más porque el resto ella decía que la vida misma te hacia aprenderlo.
Como anécdota que me sorprendió fue que cuando la llevaba al cole ella a todos los niños de su clase me presentaba todo orgullosa como "su asistenta social", me pedia hasta que luego a la vuelta fuera a recogerla para llevarla a casa ya que conmigo le gustaba hablar, yo le tenia que explicar que tenia mucho trabajo en la oficina y no podia ir, su casa del cole no estaria a más de dos minutos de distancia. En varias ocasiones los niños del cole se me acercaron para preguntarme -si yo quería ser su asistenta!!
Yo quería pasar desapercibida y no identificarme como trabajadora social delante de los niños . . .pero fue imposible porque ella misma me delataba voluntariamente y muy orgullosa    :)
Bueno este post lo he escrito ya que el otro dia me pareció verla a lo lejos en el puesto de trabajo familiar, estoy casi convencida de que era ella pero entre tanta gente no me pude acercar a comprobarlo. A ver si otro dia puedo coincidir y saludarla porque seguro que me dará un gran abrazo    :)
#megustamiprofesión