Moringa

Por Gabriel Giner @esaludcom

La moringa es un árbol originario de la India que crece en países subtropicales tanto de África como de Asia. Tiene un alto contenido en vitaminas, minerales, ácidos grasos y proteínas.

La moringa es considerada un superalimento debido al amplio abanico de beneficios que proporciona al organismo: aumenta las defensas naturales del cuerpo, mantiene a raya el colesterol, favorece la hidratación de la piel, actúa como antioxidante, regula los niveles de azúcar en la sangre… Tanto si se consume como alimento como suplemento, sus usos medicinales son muy amplios.

¿Qué es la moringa?

La moringa es una planta tropical originaria de determinadas zonas de África y Asia, como la India. Son muchas sus propiedades y beneficios para la salud; tanto es así que se le conoce como el “árbol milagro” o el “árbol de la vida”.

Una fuente muy rica en nutrientes clave para el organismo, como proteínas, vitaminas y minerales. Es por ello que desde hace varios miles de años la moringa se viene utilizando en la medicina natural.

Es un árbol que alcanza entre los cinco y los doce metros de altura; su copa es piraminal y las hojas compuestas. Llama la atención el tamaño de sus frutos, de hasta 40 centímetros de longitud y una forma muy similar a la del bastón de un tambor.

Las hojas de la moringa

La mayor cantidad de propiedades de la moringa se encuentra en sus hojas. En el caso de las hojas frescas, contienen 4 veces más vitamina A que las zanahorias, 7 veces más vitamina C que las naranjas, 4 veces más calcio que la leche y 3 veces más potasio que los plátanos. Por lo tanto, su valor nutricional es extraordinario.

En cuanto a las hojas secas, contienen 10 veces más vitamina A que las zanahorias, 17 veces más de calcio que la leche, 15 veces más potasio que los plátanos y 25 veces la cantidad de hierro de las espinacas.

Principios activos de la moringa

La moringa es rica en numerosos flavonoides con un gran poder antioxidante y que, por tanto, cumplen una función muy importante para cuidar tanto el sistema cardiovascular como el organismo en su conjunto.

Además, tiene un alto contenido en ácido clorogénico; se trata de una sustancia que permite que la planta actúa como antioxidante y antiinflamatoria.

Respecto a sus nutrientes, destaca su aporte de vitaminas A, C, E y del grupo B. La moringa también es rica en sales minerales como el potasio, el calcio, el hierro, el magnesio o el cnic, entre otros.

Propiedades de la moringa

Una de las principales propiedades que se conocen de esta planta tropical es su alto poder antioxidante. No obstante, sus propiedades van muchísimo más allá, razón por la cual se le han otorgado un amplio abanico de usos medicinales a lo largo de la historia.

La moringa destaca por su alto contenido en vitaminas del grupo B y hierro; nutrientes esenciales para evitar trastornos como la anemia ferropénica, cuya principal característica es la carencia de hierro.

Además, tiene propiedades tanto analgésicas como antiinflamatorias. Es por ello que la moringa es ampliamente utilizada para aliviar los síntomas propios de enfermedades como la artritis.

Debido a su efecto laxante, esta planta alivia una gran selección de dolencias del aparato digestivo, como el estreñimiento.

Y, por último, cabe destacar su acción cicatrizante.

10 beneficios de la moringa

A continuación señalamos cuáles son los principales beneficios de esta planta tropical. Razones más que de sobra para comprender por qué la moringa es considerada como un superalimento.

1) Previene el envejecimiento

La moringa tiene grandes propiedades antioxidantes, de modo que es una planta muy efectiva para prevenir el envejecimiento prematuro tanto de la piel como de las células. Algunos expertos recomiendan consumor una cucharadita de polvo de hoja para aumentar los niveles de antioxidantes en sangre.

2) Fortalece el sistema inmune

Las vainas de la moringa se caracterizan por ser una fuente muy rica de vitamina C. Un nutriente esencial para el buen funcionamiento del organismo ya que actúa a modo de barrera protectora para que virus y bacterias no ingresen en el mismo. Por lo tanto, es una planta fantástica para evitar enfermedades como la gripe o el resfriado.

3) Ayuda a regular los niveles de azúcar

La moringa ralentiza la velocidad a la que el azúcar ingresa en el torrente sanguíneo gracias a su contenido en isotiocianatos.

A esta conclusión llegaron un equipo de expertos tras un estudio realizado a un total de 30 mujeres. Comprobaron que tomar una cucharadita y media de polvo de hoja de esta planta tropical consiguió reducir en un 13,5% los niveles de glucosa.

4) Combate la inflamación

Gracias a su alto contenido en isotiocianatos la moringa es un alimento con grandes propiedades antiinflamatorias. Así, su consumo está recomendado especialmente en aquellas personas que padecen determinadas enfermedades como la artritis ya que alivia de forma notable sus síntomas.

5) Reduce el colesterol

Otro de los grandes beneficios de la moringa tiene que ver con su capacidad para reducir los niveles de colesterol en sangre. Una condición especialmente importante para evitar en gran medida enfermedades como la trombosis o el infarto de miocardio.

6) Lucha contra los radicales libres

La moringa es una planta que combate los daños que los radicales libres, tales como la polución, ejercen en el organismo.

7) Protege el sistema cardiovascular

Esta planta tropical evita la absorción de colesterol en el intestino, de manera que evita que se formen placas de grasa en las arterias. Con ello se disminuye el riesgo de sufrir determinados trastornos cardiovasculares.

8) Evita la anemia

Las hojas de la moringa contienen una alta cantidad de hierro (105 miligramos por cada 100 gramos de producto), favoreciendo con ello la producción de glóbulos rojos en el organismo.

9) Alivia el dolor

Tiene propiedades analgésicas de manera que ayuda en el alivio de los síntomas de trastornos inflamatorios como el reuma. De este modo, quienes padecen este tipo de enfermedades mejoran su calidad de vida.

10) Hidrata la piel

Y, por último, cabe destacar que la moringa hidrata en gran medida la piel gracias a sus propiedades humectantes. De este modo se evita la sequedad de la misma y, así, luce un aspecto más bello y radiante.

¿Cómo consumir la moringa?

Este superalimento se puede consumir y utilizar de diferentes modos. Lo ideal es incluirla en distintas recetas ya que su sabor es bastante fuerte.

  • Fruta: la moringa se puede consumir como alimento. En el caso de la fruta, no es recomendable consumirla cruda, sino cocida.
  • Semillas: por lo general, las semillas de esta planta se toman tostadas. Hay quienes las consumen a modo de snack, el cual es muy saludable ya que tiene un contenido calórico muy bajo y un buen valor nutricional.
  • Hojas: las hojas de la moringa son ricas en vitamina C y hierro. Se pueden tomar en modo de infusión o acompañando algunos platos como las ensaladas.
  • Polvo de hoja: es la forma más popular en la que se consume la moringa a nivel global ya que es muy fácil de utilizar; se puede incluir de manera sencilla en zumos, cremas, salsas…
  • Aceite de moringa: y, por último, el aceite de moringa, el cual tiene grandes propiedades nutritivas e hidratantes. Se suele utilizar para realizar distintos tratamientos en el cabello y en la piel.

Es importante evitar el consumo de la raíz de la moringa ya que los extractos de la misma contienen sustancias tóxicas que son potencialmente mortales.

¿La moringa ayuda a adelgazar?

Actualmente, dada la popularidad que ha tomado la moringa, se habla muchísimo sobre las propiedades de esta planta para perder peso. Cada vez que se explica un tema de este tipo, es importante recordar que no existen productos milagrosos que adelgacen por sí mismos; si bien es cierto que algunos pueden favorecer esa pérdida de peso, pero siempre se deben consumir bajo supervisión médica.

Pues bien, una vez aclarado este aspecto, merece la pena destacar que la moringa tiene una serie de efectos que ayudan a quemar grasa. Por un lado, la planta tropical tiene propiedades depurativas, de modo que ayuda a eliminar toxinas del organismo.

Por otro lado, la moringa acelera el metabolismo gracias a su alto contenido en glucosinolatos, los cuales se transforman en isotiocinatos durante el proceso de digestión.

Además, proporciona un efecto saciante, por lo que mantiene a raya el apetito; un aspecto muy importante a la hora de adelgazar.

Y, por último, gracias a su alto contenido en vitaminas del grupo B, es un nutriente que ayuda en la transformación de los alimentos ingeridos en energía, en vez de almacenarlos como grasa en el cuerpo.

Contraindicaciones de la moringa

A pesar de su amplio abanico de beneficios, existen una serie de situaciones en las que el consumo de moringa no está recomendado.

Es el caso de las mujeres embarazadas. El consumo excesivo de esta planta tropical durante el periodo de gestación conlleva un cierto riesgo de aborto debido a su alto contenido en vitamina A.

Además, la moringa tiene cierto poder laxante. Por lo tanto, si se toma en ayunas de manera habitual, la diarrea puede ser un efecto secundario habitual.

Del mismo modo, aquellas personas que sufren insomnio no deben consumir moringa ya que tiene un gran poder energético.

Conclusión

A modo de conclusión, destacar la gran selección de beneficios y propiedades que tiene la moringa para la salud en su conjunto, tanto a nivel físico como mental. No obstante, al igual que cualquier otro ingrediente natural, se debe consumir con moderación; de lo contrario, existen determinados riesgos como exceso de glóbulos rojos en la sangre o insomnio.