Aunque muchos niños pequeños son o se vuelven caprichosos con la comida, eso no necesariamente significa que tengan deficiencias nutricionales. Muchos alimentos comunes – incluyendo los cereales del desayuno, el yogur, la leche y zumo de naranja – contienen nutrientes importantes, como vitaminas del complejo B, vitamina D, calcio y hierro. Así que tu hijo probablemente esté recibiendo más vitaminas y minerales de las que puedes pensar.
Por otra parte, … Seguir leyendo