Bicicleta, bistrots, brasseries, baguettes, tiendas, restaurantes favoritos, paseos interminables, familia, patisseries, chic parisien palpable en el aire, subidas y bajadas al Sacré coeur desde mi pisito de Montmartre constituyen estos días…y aumentan mis dudas acerca de mi voluntad de, tal vez, dejar Madrid por ti.
Paris, je t’aime.