Me sorprendió que, a pesar de no ser de un gran tamaño, la ciudad tiene muchísimas cosas por enseñar: para todos a los que nos atrae la historia, es todo un amplio marco de referencias que dejan huella y que podemos seguir gracias a sus monumentos, calles estrechas, puentes...
Creo que este tipo de ciudades me gusta tanto porque, para mí, es importante saber lo que tenemos alrededor y cómo éramos antes.