Me gusta su historia, como se ha ido gestando, de ser una idea en la mente hasta que se materializó. Unas toallitas comprimidas para tu ritual de de belleza.
Está claro que la limpieza facial es el paso básico e imprescindible para disfrutar de una piel sin impurezas, sana y radiante.
¿Como se usa?
Es muy sencillo y cómodo, primero añades agua o el líquido que prefieras (yo uso agua micelar), ella solita crece y desenrollas la toallita y ya está lista para usar!
¿Por qué me gusta NÄPS?
Me gusta porque adquiere un tamaño perfecto para cubrir el rostro, no se queda ridícula como ocurre con otras toallitas, en las que su tamaño raquítico te hace gastar de forma desesperante.
Me gusta porque es una opción natural, biodegradable e hipoalergénica que no contiene alcohol ni perfume.
Puedes utilizarla más de una vez (incluso hasta 4 veces), puedes reciclarla utilizándola para otras cosas, te podría dar muchas ideas de qué cosas puedes limpiar o quitar el polvo, pero prefiero dejar que sea tu imaginación la que lo descubra.
Y sobre todo me gusta NÄPS porque nace desde el corazón y llega a la gente de forma sencilla y transparente, por eso tienen el éxito asegurado. Desde aquí mis felicitaciones a su creadora Teresa.
Ya me he convertido en una fiel seguidora de estas toallitas, he comprado mi primer paquete de 100 toallitas y estoy segura que repetiré.
Dile adiós a los discos desmaquillantes y adentrate en el mundo NÄPS!!