Si preparamos bastante cantidad las podemos conservar en su almíbar hasta el momento de su uso. Incluso el almíbar lo podremos utilizar para bañar bizcochos.
Ingredientes:
-2 naranjas
-400 gr. de azúcar
-250 gr. de agua
Preparación:
Como vamos a utilizar la piel de la naranja, antes de su cocción debemos lavar perfectamente la fruta. Podemos utilizar un cepillito que tengamos para la cocina.
Ponemos en un caldero amplio el azúcar y el agua. La dejamos que se disuelva a fuego medio.
Mientras, con ayuda de un cuchillo bien afilado, cortamos la naranja en rodajas de medio centímetro de espesor más o menos.
Cuando el agua y el azúcar que habíamos puesto al fuego anteriormente empiece a hervir introducimos las rodajas de naranjas, a ser posible no amontonadas una sobre otra para que no se estropeen. Dejaremos que se cocinen durante una hora aproximadamente a fuego medio. No introducimos ningún utensilio para removerlas, bastará con mover el caldero para que se impregnen bien de todo el almíbar y se cocinen por igual.
Una vez pasado el tiempo retiramos del fuego y sacamos las rodajas con mucho cuidado, para ponerlas a secar sobre una rejilla. Si no las vamos a usar en el momento las podemos dejar en un tarro de cristal bien cerrado con su almíbar.