Receta facilitada por Labidú del blog "Con la luz de mi cocina"
Se acerca el fin de semana y es un buen momento para preparar algún postre, que nos alegre ese café de la tarde, ya que el tiempo invita a estar en casa con una buena calefacción.
La receta que hoy os dejo, os puedo asegurar que es de las más sorprendentes que yo he preparado a la vista de los resultados.
No me podía imaginar que YO pudiera llegar a superar esos bollos tan extraordinarios que nos ofrecen en las buenas pastelerías (tipo mugí.. mogi... raquetas...).
Cuando pasé a visitar la fantástica cocina de Labidú "Con la luz de mi cocina", y me encontré con estos narcisos, me quedé prendada, y supe que los iba a preparar de inmediato, como así fue.
El resultado ha sido tan sorprendente, que ésta será una de esas recetas que yo guardo como joyas y que ya siempre me acompañarán cuando verdaderamente quiera disfrutar de un bocado extraordinario.
Gracias a la generosidad de Labidú,que comparte los conocimientos que va adquiriendo en sus clases de cocina, he podido superar un reto que hasta ahora, para mí, era imposible.
La cocina que Labidú nos transmite por medio de su blog, no es una cocina al uso. Sus recetas siempre están impregnadas de una sensibilidad especial, que despiertan el interés por el plato que nos presenta (en la mayoría de las ocasiones, platos rescatados de su infancia) pero que entre sus ingredientes, siempre nos acerca al recuerdo de l@s que nos precedieron, puesto que la cocina es herencia y continuidad.
Herencia que no debemos olvidar, y continuidad que gracias a personas como ella, nos enriquecen a los que deseamos aprender.
¡¡Gracias Labidú por compartir tanto bueno!!
Ingredientes
- 500 g. de harina de fuerza
- 5 g. de mejorante (2 sobre morados y 2 blancos)
- 10 g. de sal
- 75 g. de azúcar
- 75 g. de mantequilla sin sal
- 1 huevo
- 175 ml. de agua
- 40 g. de levadura de panadería
Para el Relleno
- Crema Pastelera (podéis encontrar la receta en ésta tarta, utilizando la mitad de las cantidades.)
Para Decorar
- 3 cucharadas de azúcar
- 3 cucharadas de leche
- cerezas confitadas (yo no tenía y puse almendras y naranja confitada (ver receta)
Preparación
- Proceder a elaborar la crema pastelera. Dejar enfriar, meter en una manga y dejar a la espera.
- Colocar la harina sobre la mesa de trabajo. Darle forma de volcán e ir colocando el resto de ingredientes alrededor de la harina, (dejando la levadura para el último momento): mejorante, sal, azúcar,huevo, mantequilla del tiempo y cortada en trozos y la mitad del agua que se verterá sobre el azúcar.
- Comenzar a amasar e ir añadiendo el resto del agua, según lo vaya pidiendo la masa.
- Finalmente, incorporar la levadura desmenuzada.
- Amasar todo el conjunto hasta lograr una masa fina y elástica. Formar una bola. Tapar con un paño y dejar en reposo unos 10 minutos.
- Pasado el tiempo, dividir la masa en porciones de unos 50 g. y darles forma de bola. Bolear la masa para que adquieran consistencia y que no se deformen en el momento de la manipulación.
- Dejarlas que leven hasta que doblen su volumen, en un lugar cálido, libre de corrientes de aire, y tapadas con un paño.
- Una vez que hayan levado, ir estirando cada bola con el rodillo dándole forma rectangular de unos 14 cm. de largo.
- Extender un cordón de crema pastelera en un extremo de la masa. Envolver como si fueran canelones.
- Darle 5 cortes a la masa, dejando un trozo sin cortar para que exista una unión.
- Colocar sobre la placa del horno a la que se le pondrá papel vegetal o silpat, e ir formando la flor, de modo que un corte se vaya apoyando sobre el anterior.
- Rellenar cada pétalo con más crema pastelera, poniendo una porción generosa en el centro.
- Pincelar con huevo batido para que se peguen los extremos y dejar tapados hasta que doblen su volumen.
- Una vez que la masa haya fermentado lo suficiente, pincelar de nuevo con huevo batido, suavemente para evitar que la masa se desgasifique.
- Colocar en el centro una cereza, o como en mi caso, espolvorear con almendras laminadas, y colocar una almendra en el centro y un trozo de naranja confitada.
- Meter en horno precalentado a 200º unos 7/8 minutos o hasta ver que empiezan a tener un bonito tono dorado.
- Mezclar la leche con el azúcar y calentar en el microondas hasta que se disuelva el azúcar.
- Pincelar los narcisos con la mezcla anterior, una vez que salgan del horno.
- Dejar enfriar sobre una rejilla y....
¡¡¡A disfrutar!!! Son una auténtica delicia.
Y como de un día para otro la masa ya comienza a endurecer, se pueden congelar. Cuando se quiera disfrutar de ellos, simplemente se sacan del congelador, se meten en el microondas en el programa de descongelar unos segundos y se siguen teniendo unos narcisos como recién horneados.