Navidad en casa de LunaLuna se acaba de comer la última chocolatina que queda en el calendario de adviento.La casa huele a leña y almendra y el salón está cargadamente decorado con espumillón de colores. La casa no está en completo silencio, se percibe el chasquido de la encina en la chimenea que resuena a destiempo e ilumina la habitación con una luz cálida y tenue.
Para mí una cámara de fotos. Me encanta sacar fotos a todo, sobre todo a mi abuela. Mirad:
-¡Hija! ¿Por qué has derramado esto por todos lados?, has manchado estos adornos tan bonitos. ¿Qué estás haciendo tanto tiempo con ese papel? - Refunfuña cabreada Carmen.-Abuela, esto es un belén, representa el nacimiento de Jesús. ¡Estamos casi en navidad! Lo que tiene por encima es harina, la echamos para que parezca que es un paisaje nevado. Ahora estaba escribiendo la carta a los reyes magos ¿Tu qué vas a pedirles?-
Carmen piensa unos segundos en toda la información que le ha dado Luna y contesta…-¿Pedir? Yo no he dado nada para que pueda pedir algo…
- ¡Son los reyes magos! Te pueden traer lo que pidas- Dice Luna entusiasmada.-Bueno bueno… pues… yo necesito unas alpargatas nuevas, que el otro día se me mojó el esparto mientras lavaba en el río y ya no hay quien las enderece.
- Vale abuela, se lo escribo yo a los reyes en mi carta, ¡verás como te las traen!- Anda déjate de tontunas y recoge ahora mismo el lío que hay montado ahí – Dice Carmen señalando el Belén. – Tiene mucho polvo.
- Claro abuela.- responde Luna devolviendo una tierna sonrisa.