Niños.

Por Kaliha
   Fuente original: "El crudivorismo puede salvar tu vida" de Marc Ams.
  
    Pregunta: Un niño de cinco años ¿puede seguir esta dieta?
   Respuesta: Sí, puede y debe seguir esta forma de vida, pero como es lógico de un modo modificado. Un niño con la edad de cinco años es un ser humano creciendo y por eso se le tiene que dar también los alimentos que le hacen crecer en más cantidad. En un niño de cinco años debemos procurar que no le falten las proteínas como son los huevos fértiles, el yogur y los quesos naturales hechos a partir de la leche de cabra o de vaca, semillas oleaginosas como el sésamo, almendras, girasol, lino ... y frutos secos como las almendras, nueces, etc., levadura de cerveza y otros muchos alimentos. Los niños deben consumir una proteína fuerte al día y otra ligera, pero no más porque un abuso de proteínas en ellos también puede ocasionarles problemas. A veces el temor o falsos prejuicios o un mal consejo de un naturópata incompetente hacen creer a los padres que sus hijos necesitan forzosamente consumir carne y pescado. Eso no es cierto en absoluto. Está más que demostrado que se goza de una perfecta salud en aquellos niños que han seguido una dieta ovolacto-vegetariana compatibilizada sin necesidad de que consuman proteínas cárnicas. Pero si aún así insistes en darles tales alimentos a tus hijos limítate a hacerlo un día a la semana en forma de pescado blanco, aves (sin hormonas) y cordero. Pero te repito que no es necesario.   Lo importante es que enseñes al niño a disfrutar de las frutas frescas y vegetales crudos. Las ensaladas de vegetales y las macedonias de frutas, el muesli ortotrófico y las sopas de fruta deben de ser los principales alimentos de nuestros hijos. Un niño de cuatro años en adelante debe de tener cereales integrales y pan dextrinado en su dieta, procurando no abusar nunca de ellos. Las semillas y frutos secos como las nueces, almendras, pipas de girasol y manteca de cacahuetes hecha por ti, etc., son alimentos perfectos para un niño que crece así como también lo son el trigo, la alfalfa, el girasol y demás semillas germinadas.   Un niño puede y debe de ayunar fácilmente un día a la semana por un período de 24 horas. Esto es muy importante a partir de los 3 años, pero antes de esa edad no es necesario, siendo suficiente con un día a frutas variadas a la semana. El ayuno semanal de 24 horas es la mayor garantía de salud para tus hijos y es la única y la mejor vacuna contra la enfermedad que puedes proporcionarels. Vengo controlando a niños desde antes de su nacimiento y he supervisado su dieta durante más de 9 años y puedo asegurarte que los padres que fueren fieles a esta forma de vida no saben lo que es un hijo enfermo.   Pregunta: Mis hijos no quieren comer frutas frescas ni vegetales crudos ni tampoco quieren comer vegetales cocinados. Todo lo que quieren comer es la carne, patatas fritas, pan blanco y dulces y bebidas azucaradas como la Coca-Cola... ¿Qué puedo hacer?
   Respuesta: En primer lugar debes ser un ejemplo para ellos, no puedes esperar que ellos consuman estos alimentos si tú tampoco los consumes.
   Realmente estos niños no pueden seguir una dieta peor. Sus 270 papilas del gusto están pervertidas y viciadas. Es por esto que piden alimentos excitantes como las proteínas cárnicas y productos azucarados así como los almidones refinados y salados. Usted como padre o madre tiene que controlar la situación y tiene que convencer. Usted mantenga alepadas de su casa todas las bebidas gaseosas y sustitúyalas por una buena licuadora. Sustituya el pan blanco y los demás cereales refinados por sus equivalentes integrales. Trate de sustituir poco a poco los mortales dulces refinados por la miel cruda, la melaza de caña y el sirope sin azúcar. Esmérese por prepararles los platos de forma agradable.
   Prepáreles una comida sana y si la rechazan... eso me parece estupendo: ¡déjeles ayunar! Deje que el hambre natural despierte en ellos el deseo hacia alimentos naturales y no ceda o perderá la batalla. Tampoco permita que los abuelos, los tíos o los vecinos estropeen su labor psicológica. Recuerde que es por su bien y por su salud.
   Los niños necesitan una disciplina estricta en lo referente al comer, pero a medida que ellos regeneran su paladar la disciplina se transforma en un placer Si ellos desarrollan un hambre natural y real ellos van a descubrir lo bueno de la dieta sana y se lo agradecerán. Procure que sus hijo pequeños se relacionen con otros niños que también sean educados bajo el espíritu de la higiene natural pues eso les ayudará.
   Desde que tienen 3 años los niños también tienen que ayunar 24 horas por semana o como mínimo un día semanal de monodieta de frutas o de su jugo. Esto no sólo limpiará sus pequeños organismos sino que además les desarrollará su carácter y les protegerá contra los trastoros típicos de su edad, especialmente contra los catarros. Pero después de su ayuno semanal asegúrate que duratne el resto de los días tienen una buena nutrición. Después del ayuno ellos van a saborear las ensaladas y los alimentos naturales que se les ofrece con verdadero deleite. Vigila de que siempre consuman el doble de alimento crudo que de cocinado. Si áun toman una cierta cantidad de carne y pescado dáselos sólo un día a la semana y siempre acompañados de muchos vegetales crudos. Pero déjales comer siempre primero las ensaladas antes de que les des la comida cocinada.
   Tu mente y tu amor de adulto debe dominar antes que la mente de tus hijos. Tú puedes ajustar y controlar las costumbres de comer de tu familia pero trata de convencer y no de forzar.
   Existen muhoc niños que son víctimas de sus padres y de sus madres. Muchas madres pusilánimes y faltas de carácter ceden ante los chantajes de sus hijos de modo que les dan de comer cualquier cosa y luego tienen que andar asustadas corriendo en busca de remedios milagrosos cuando éstos enferman. Padre y madre deben recordar una cosa, y es que en sus manos y en su despensa está el escoger entre la salud o la enfermedad de sus hijos. Haz tú la elección.