NO nos vamos: la culpa fue del coronavirus

Por Monica Monica Moro Mesa @monicamoro
Hoy debería tener la barriga a tope de mariposas, hoy debería tener 4 maletas  y una mochila llenas hasta los topes, hoy debería haber dormido con las emociones a flor de piel ya que hoy, sábado 4 de abril de 2020 ERA EL DÍA!!!! Sí, hoy iniciabami cuarto viaje a Senegal acompañada de Laura y Maite. Las 3 nos habíamos puesto las pilas desde que decidimos, hace ahora dos meses, viajar a Senegal para seguir con lo que allí había empezado: salud, educación y mujeres. 
Teníamos en marcha una nueva aventura al país de la teranga con muchas, muchas cosas por hacer. El recorrido previsto más o menos el habitual: llegada al aeropuerto, noche en Mbour y viaje hacia País Bassari, stop en Tambacounda para recoger a Marie Luise y unos días en Ibel trabajando con el grupo de mujeres del proyecto Enhebra Badalona-Senegal además de visitar el hospital de Kedougou y el poste de santé y la escuela de Ibel. La segunda parte del viaje en Casamance, a conocer esta bella región y día en la isla de los fetichistas. Oportunidad para seguir creciendo con las mujeres de allí y nuestro proyecto Enhebra Badalona-Senegal!, una experiencia de empoderamiento femenino a través del lenguaje textil de las arpilleras. Regreso cruzando Gambia, desconexión en Faoye, paseo por la isla de las conchas y vuelta a la Petite Côte. 

Friends will be FRIENDS

Durante el viaje turismo, reencuentros y buena compañía con mis amigos Mbaye y Abdoul, veteranos experimentados de mis viajes y apuesta segura para conseguir la mejor de las experiencias africanas jamas soñadas. Y Arouna con quien íbamos a encontrarnos en el aeropuerto y bajar a Ibel para disfrutar del "Chiringuito", echaré de menos los platos de Seidou!!!
Hasta hace 15 días, las 3 viajeras hemos estado trabajando sin descanso, pero el coronavirus desencadenó la emergencia sanitaria en la que aún nos encontramos y nos hizo ver que la epidemia se convertía en pandemia y confinamiento. FIN DEL VIAJE!
Nos íbamos cargadísimas, habíamos conseguido:
  • 100 gafas graduadas donadas por Maite González de Josa òptics de Sant Just
  • 100 gafas de sol donadas por Menarini
  • 1.400 guantes sanitarios que de nuevo nos había facilitado Dani 
  • 1 fonendoscopio cortesía de un amigo de la red comercial de Menarini
  • Medicamentos facilitados por el banco de medicamentos de Farmacéuticos sin Fronteras
  • Material escolar: libretas, bolígrafos y lapices
  • 8 pares de botas, ropa deportiva y protecciones diversas que mi amigo David y su equipo de fútbol nos habían hecho llegar. 
  • 2 pares de botas de fútbol y unas zapatillas deportivas donadas por Ita y Tonia que habían "dejado descalzos" a sus retoños.
  • Casi 10 kgs de ropa de toda índole
  • 20 camisetas deportivas y 100 blocs para los colegios de Nuria de ANEFP
  • Una donación para comprar una báscula para el centro de salud de Ibel de Clelia
  • Dinero de la Fundació Ateneu Sant Roc, de amigos y amigas para: comprar 3 máquinas de coser y material de costura, pagar los desplazamientos del "costurero" que estaba enseñando a las mujeres a usar a máquina que ya tienen, reparar la tienda de la isla de los fetichistas, etc. y de Diomcoop que había cosido 200 bolsas para la jornada de la Red TBS y donaba una parte del importe para el proyecto Enhebra
y... tantas otras pequeñas contribuciones que se quedaron a la mitad al conocer que por el momento nos quedábamos en tierra.

Pequeña selección de material


Mbaye y el pequeño Abdoul

Estaba ilusionada con esta nueva aventura, iba a reencontrarme con personas que en cada viaje se han convertido en MÁS amigos y amigas como son Abdoul, Mariama, Georgette y Aissatou, Landing, Manga, Dianeba, Djiba, Adama, Aminata, Viviane, mami Bas, Rita, Jean Paul, Demba, Assane, Fatou, Marie, Cheick, Bamba, Leye, Seynabou y tantas otras con las que comparto buenos momentos imaginando como mejorar.Teníamos tantas, tantas cosas por hacer y tantas, tantas cosas por vivir... Pero como me decía Abdoul, el hermano pequeño de Mbaye: cuando veo que llega el 4 de abril y no vienes "tengo ganas de cargarme al corona", y yo, y yo Abdoul!!!
En mi equipaje, además no iba a faltar la última arpillera que he estado cosiendo desde que volví un ya lejano 5 de noviembre, aún no tiene nombre, aún no tiene escrita su historia... todo se quedó congelado cuando tuve la certeza de que este #senegaldream3 no iba a materializarse hoy. 

Arpillera para la isla de Edhge con la llegada en piragua, la mujer que viene en su barca con las ostras recogidas en los manglares y el grupo cosiendo bajo un arbol a la sombra de las palmeras.


Y el crono que ha estado en este blog 151 días llegó a su fin, a las 11'25h, cuando debía despegar el vuelo HC405 de Air Senegal en el aeropuerto de Barcelona se puso a cero, marcó los 5 ceros tan esperados y hoy tan dolorosos.Y desde que sabemos que no vamos... todo ha cambiado. Arouna me anima enviándome fotos de los futuros lavabos del Chiringuito y Abdoul me enseña la nueva habitación que ha hecho además de un precioso cobertizo. Mbaye sigue en Mbour, triste viendo que durante un período más o menos largo no va a trabajar pues el coronavirus dejó el país sin turistas.

Habitación en proceso y cobertizo nuevos en el campamento de Abdoul

Lavabos en proceso en el Chiringuito de Arouna en Ibel

Y sí, en tiempos de confinamiento llamadas para vernos en un curioso triangular Mbour - Ibel - Barcelona 


A todo esto, con el cambio de planes sin derecho a réplica, mi casa ha quedado que parece un dingui con bolsas y bolsitas por todas partes. Y la semana pasada se me encendió una bombilla en mi cabeza, y puse buena cara al mal tiempo. Recordé los 1.400 guantes sanitarios preparados para irse a Senegal y no me lo pensé 2 veces: Marina llevó 800 al CAP Borrell donde mi amiga Mireia y su equipo están en primera linea y Laura llevó 600 al Hospital Municipal de Badalona. Que buenas sensaciones y que paz ayudando de manera fortuita en esta emergencia #covid19. Y... también Eric y Guille, nuestros amigos de The Happy endings recordaron los 900 guantes que por espacio no habían entrado en su coche camino de Marruecos y se fueron al CAP de Manso. Ciertamente, de sopetón una realidad inesperada te abre las puertas de par en par para ser parte, aunque sea modestamente, de la solución del problema.
Me ha costado mucho, mucho escribir este post, ojos húmedos, corazón encogido y mirada larga, no hay otra. Sin vuelos, sin fecha, sin opciones mientras sigamos con la pandemia en casa. Seguro que vamos a salir de esto entre todos, y volveremos a encontrarnos, a abrazarnos, seremos personas más fuertes, más solidarias y espero que más comprometidas y responsables. El revolcón que nos está dando el coronavirus está siendo uno de los retos más grandes a los que como sociedad a nivel mundial nos enfrentamos pero saldremos de esto, seguro!
Creer que las cosas saldrán bien brinda la confianza necesaria para seguir lo que dice el corazónSteve Jobs