Notas sobre la estupidez

Por Peterpank @castguer

Algunos nacen estúpidos(no diferenciamos entre sexos), otros alcanzan el estado de estupidez, y hay individuos a quienes la estupidez se les adhiere. Pero la mayoría son estúpidos no por influencia de sus antepasados o de sus contemporáneos. Es el resultado de un duro esfuerzo personal. Hacen el papel del tonto.

En realidad, algunos sobresalen y hacen el tonto cabal y perfecto. Naturalmente, son los últimos en saberlo, y uno se resiste a ponerlos sobre aviso, pues la ignorancia de la estupidez equivale a la bienaventuranza. La estupidez, que reviste formas tan variadas como el orgullo, la vanidad, la credulidad, el temor y el prejuicio.

En el trascurso de la historia humana, la estupidez ha aparecido siempre en dosis abundantes y mortales. Una ligera proporción de estupidez es tan improbable como un ligero embarazo. Más aún, las consecuencias de la estupidez no sólo son cómicas sino también trágicas. Son reideras, pero ahí concluye su utilidad. En realidad, sus consecuencias negativas a todos influyen, y no sólo a quienes la padecen.

El mismo factor que antaño ha determinado persecuciones y guerras, puede ser la causa de la catástrofe definitiva en el futuro. Pero encaremos el problema con optimismo. Acabando con la raza humana, la estupidez acabaría también con la propia estupidez. Y ése es un resultado que la sabiduría nunca supo alcanzar.

Desde los vanos ritos de Luis XIV hasta la autocastración de la secta religiosa de los skoptsi; desde el miembro de la Academia Francesa de Ciencias que obstinadamente insistió en que el invento de Édison, el fonógrafo, era burdo truco de ventrílocuo, a la técnica de Hermippus, que aseguraba la prolongación de la vida mediante la inhalación del aliento de  las jóvenes doncellas, desde la fe en la vid que producía sólidas uvas de oro, al bibliófilo italiano que consagró veinticinco años a la creación de una biblioteca de los libros más aburridos del mundo. ¡Cuán estúpidos somos los mortales!

La estupidez es el arma más destructiva del  hombre, su más devastadora epidemia, su lujo más costoso.  ¿Hay algo más característico de nuestra humanidad que el hecho de que el Thesaurus de Roget consagre seis columnas a los sinónimos, verbos, nombres y adjetivos de la “estupidez”, mientras la palabra “sensatez” apenas ocupa una? La locura es fácil blanco, y por su misma naturaleza la estupidez se ha prestado siempre a la sátira y la crítica.

Sin embargo (y también por su propia naturaleza) ha sobrevivido a millones de impactos directos, sin que éstos la hayan perjudicado en lo más mínimo. Sobrevive, triunfante y gloriosa. Como dice Schiller, aun los dioses luchan en vano contra ella.

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PD: La estupidez carece de sobriedad, refleja miseria moral e intelectual y suele estar asociada  con la ignorancia y la bajeza; a la estupidez también se le llama estulticia, estolidez, sandez e insensatez.  Bertrand Russell, el filosofo más influyente del siglo XX, entendía que ´´la causa fundamental de los problemas del mundo es que los inteligentes están llenos de dudas y los estúpidos completamente seguros´´ y, hasta se ha llegado a creer que la estupidez gobierna el mundo, pero en realidad lo que si demuestran la evidencia histórica y la cotidianidad es que el factor estupidez es constante en la vida humana y que el estúpido con poder se vuelve mas estúpido (psychic inflation) y, por consiguiente, más peligroso, o peligrosa.