Novartis logra atrasar el comienzo del juicio por patentes en India

Por Thomasmann
El Tribunal Supremo de la India decidió hoy aplazar para septiembre la ventilación del caso entre las empresas farmacéuticas nacionales y la multinacional Novartis AG por la producción del Glivec, un efectivo medicamento contra el cáncer.Los ojos de medio mundo están pendientes del proceso, pues cualquiera que sea el veredicto de la corte, podría cambiar las reglas en ese terreno y limitar o ampliar el peso mundial de la nación asiática como suministrador de medicamentos más baratos.Según expertos en el tema, la audiencia puede durar semanas y el Supremo aún podría tomarse unos días más para pronunciarse sobre el caso.Llamada "la farmacia de los pobres", la India viene negándose desde el 2006 a conceder una patente a Glivec bajo el argumento de que no es un producto nuevo, sino la modificación de un compuesto conocido (el mesilato de imatinib; en Estados Unidos se vende bajo el nombre comercial de Gleevec).El medicamento representa un gran avance en el tratamiento de la leucemia mieloide crónica y algunos tipos de cáncer gastrointestinal porque el cuerpo lo absorbe hasta un 30 por ciento más que otros compuestos.Genéricos hindúes para el desarrollo.Según datos de las ONG, en la actualidad hay al menos 7.000 solicitudes de patentes esperando a ser revisadas por el Gobierno indio. Un estudio de Alianza Farmacéutica India, posteriormente apoyado por un informe del gobierno de EE UU, estima que, entre 1995 y 2005, sólo 250 de las 7.000 medicinas eran realmente innovadores y no medicamentos antiguos con pequeñas modificaciones, que es el caso de Glivec, que no tiene permitida la patente.India es el mayor proveedor de medicamentos genéricos de alta calidad y bajo coste para los países en desarrollo', aseguran Intermón Oxfam y Médicos sin Fronteras. Más del 50% de los medicamentos que distribuye Unicef y el 70% de los fármacos contra el sida del programa de EE UU en países en desarrollo se fabrican en India, con una ahorro del 90%21 de Agosto de 2012.Médicos sin Frontera.NUEVA DELHI (EFE)