Os cuento detalles que quizá no sabíais: Las uñas de las manos crecen 2-3 mm al mes mientras que las de los pies crecen 1 mm al mes. Las uñas crecen más rápido en verano, y crecen más las de la mano dominante.
Las uñas pueden decir mucho de nosotros y de nuestro estado de salud. Por ello repetimos lo de que “la dermatología es la cara externa de la medicina interna”. Por ejemplo la uñas pueden indicar:
1. ESTRÉS. El estrés continuado puede producir líneas transversales en la mayoría de los casos por manipulación.
2. LUNARES BENIGNOS O MELANOMAS MALIGNOS. Debajo de la uña pueden aparecer lunares que en ocasiones pueden ser malignos. Los lunares se manifiestan en forma de una línea longitudinal oscura llamada “melanoniquia”. Es conveniente la valoración de un dermatólogo para descartar malignidad. Recordad que Bob Marley falleció a causa de un melanoma en la uña del pie.
3. PSORIASIS. La psoriasis es una enfermedad de la piel que con mucha frecuencia afecta las uñas. En ocasiones la psoriasis sólo afecta las uñas, sin afectar la piel. Los signos de psoriasis ungueal son variados y van desde un “piqueteado” en la lámina de la uña hasta las llamadas “manchas de aceite”.
4. ENFERMEDAD PULMONAR O RENAL. Tanto las enfermedades de pulmón como las del riñón pueden producir deformidades de las uñas que pueden alertar sobre un proceso interno.
5. HONGOS. Las uñas amarillas o con zonas “callosas” pueden indicar una infección por hongos.
6. REACCIÓN A FÁRMACOS. En ocasiones determinadas reacciones a fármacos producen “onicolisis”, es decir, desprendimiento de la lámina ungueal.
7. DEFICIENCIA DE HIERRO E HIPOTIROIDISMO. La deficiencia de hierro en sangre puede producir las llamadas uñas en cuchara o “coiloniquia”.
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