¡Buenas tardes! No quería acabar el año sin pasar por aquí para compartir un breve resumen de este increíble año. Igual muchas de las cosas que van a leer pueden sonar a tópico, pero es que son tan ciertas...Siempre me he considerado afortunada, siempre he intentado quedarme con lo positivo y no ha habido ningún año, hasta el momento, del que pueda decir "quiero hacer borrón y cuenta nueva". Hay que centrarse en lo bueno, quedarnos con esos momentos grabados en nuestra memoria para siempre porque son los que nos ayudan a ser felices y a seguir cada día dando lo mejor de nosotros mismos. El 2015 fue un año increíble, el año que fui madre por primera vez, el año que aprendí a amar sin medida y el año en el que me di cuenta de que la felicidad está en las pequeñas cosas, en las más sencillas.
Pero el 2016 me trajo cosas aún mejores. Poder seguir despertando cada mañana con los ojos y la sonrisa del pequeño Arturo, ¡eso me daba la vida! Da igual lo cansada que estés o como te sientas, una sonrisa mañanera de esas lo cura todo. Yo no sabría explicarlo pero podría asemejarlo con una medicina...Es como si te doliera algo y de repente, ves esa sonrisa y ya no te duele nada, te olvidas y sólo sientes felicidad, no sé a las otras que sean madres, pero a mi me pasaba y me sigue pasando.
Si tuviera que elegir un momento de
Enero, serían varios: el día de Reyes con Arturo abriendo los regalos y jugando con mis padres, los recibimientos a lenguetazos de Kira en el coche y las mañanas en la cama acurrucados.
En Febrero vinieron nuestros primeros carnavales. Tenía claro que Arturo debía ir de pingüino porque eran tan bailarín como Happy Feet. Con la falta de tiempo no nos curramos para nada el disfraz pero fue un éxito ¡estaba tan gracioso que daban ganas de comérselo! En febrero también empezó a jugar mucho con Arturo, los dos se dieron cuenta que se lo pasaban bien el uno con el otro y siempre se oían carcajadas con los juegos inventados por Papa Arturo, tengo como unos miles de videos - por lo bajo - en el teléfono.
En Marzo hubo otros cientos de momentos que podría compartir, pero me quedo con las noches en la que los tres nos quedábamos relajados en la cama, al igual que seguimos haciendo ahora y sin duda sigue siendo mi momento favorito del día, es como si el reloj se parase. Aunque reconozco que de marzo recuerdo perfectamente el día que encendí la luz y Arturo tenía las piernas por fuera de la cuna, me entró un ataque de risa tremendo de verle ahí tan contento intentado escapar.
En Abril hicimos varias cosas por primera vez. Hasta ese momento no le había llevado al supermercado porque no quería que se pusiera malo con el frío de las neveras. Pero un día tuve que ir y tenía que llevármelo así que le forré y para allá que fimos ¡le encantó! Estaba contentísimo en el carro, le gustaba ver las luces y los colores y yo disfruté con verle. También fuimos por primera vez a la playa. Había probado la piscina el verano anterior - que le había encantado, por cierto - pero nunca había estado en contacto con el mar, las olas y la arena. Pues creo que como buen hijo de canarios, una adicta al agua y otro adicto a las olas, ha salido a sus padres y es un loco del mar. Ese día disfrutó muchísimo y ahora tiene una conexión muy fuerte con el mar y las olas. Estoy deseando que 2017 traiga días de sol en los que podamos seguir disfrutando de este paraíso. Y por primera vez, Princeartu nos sacó un selfie 😂
Y llegó Mayo. Su mes, nuestro mes. Ese mes en el que hacía un año que estaba en nuestras vidas, y que sin duda lo único que ha hecho hasta ahora es traer alegría y muchos momentos de risa hasta las lágrimas. A esas alturas ya se sabía el cumpleaños feliz, así que aplaudió y "sopló" las velas, y disfrutó de su momento protagonista. Después de la tarta se quedó frito hasta el día siguiente, que buen dormir tiene ¡y cuanto se lo agradecemos!
Y en Junio llegó nuestro momento! Un momento que Papá Arturo no quería pasar porque no quería irse tan lejos, pero yo insistí hasta conseguir moverlos a todos a Nueva York, y una vez allí Papá Arturo dijo "tenías razón, y tendríamos que habernos quedado más días" A ver donde vamos a parar este 2017, que ya tengo un destino en mente! Era el primer viaje internacional de Arturo (bebé) y la experiencia fue increíble, lo gozamos los tres, nos organizamos genial, y sin duda es una experiencia que repetiría. Fueron muchos los que nos dijeron que era una locura un viaje tan largo con un bebé "tan pequeño", pero luego llegas allí y ves a otros tantos miles de turistas viajar con sus familias y tan tranquilos. Íbamos en otro plan, sin prisas, pero conseguimos conocer la ciudad de Nueva York y Philadelphia y a veces parecía que Arturo (bebé) se estaba enterado de todo porque se emocionaba con todas las cosas. Sin duda fue un viaje para recordar.
¡AY JULIO! Que calor, recuerdo el día en el que por fin sacamos algunos de su regalos de cumpleaños, como el coche de plástico y para poder entretenerle y refrescarle se me ocurrió hacerle una piscina ¡como disfrutó! Me encantó verle mojándose y jugando con el agua. También fue la primera vez que soplamos las velas los tres juntos. El año anterior no había celebrado el cumple, no tenía tiempo, pero este año si que no faltó una tarta y una foto en familia.
Y en Agosto estrenó un nuevo juego que le gustó tanto que no pude evitar sacarle unas fotos y un video, como le gustaba tanto conducir el coche de su padre, le dimos a probar este juguete que le había regalado en su cumpleaños y bueno, su cara lo dice todo. Con esas cosas me refiero a lo de "me da la vida". También nos fuimos de finde familiar a un hotel y se volvió loco en la playa. En esos momentos el disfruta muchísimo pero yo disfruto más aún viéndole. Que ganas de verano otra vez!
Y en S eptiembre fue la primera vez que le dejamos toda la noche en casa de mi madre para irnos de bodorrio. De ahí nuestras caras de cansados. Los momentos de pareja sin bebé son necesarios así que #Kingartu y la Marilyn se lo pasaron bomba y no paramos de bailar en toda la noche. Después de esa boda recuerdo que nos dieron ganas de organizar un día al mes de fiesta y regaeton, aunque sólo lo hemos cumplido una vez, jajaja.
En Octubre nos propusimos empezar a hacer excursiones por la isla para descubrir sitios nuevos, recordar otros en los que ya habíamos estado y poder compartirlo con ustedes en nuestro canal de vlogs. Me encanta hacernos una foto de tres y poder guardarla para recordarlo en un futuro, aunque sin duda la que más ilusión me hizo fue la del Teide, jajaja. Creo que lo volveremos a visitar a ver si lo pillamos con nieve 😜 Prepárete Papá Arturo, porque pronto te toca volver a llevarnos!!
Querido Noviembre. Parece que cuando nuestros hijos son pequeños no podemos aprender nada de ellos, pero lo cierto es que nos enseñan muchísimas cosas, al menos a mi me sorprende cada día. Me sorprende la imaginación que tiene y las cosas que trama con lo que ve a su alrededor. En la farmacia de mi suegra se entretiene metiéndose en las cajas y en casa de mi madre se entretiene sacándole todo (la tiene loca) y últimamente hace equilibrios encima de la lata que ven, tengo videos de ese día y era demasiado gracioso verle ahí encima haciendo el chulito. Y si, no podré olvidar el día que consiguió salir del parque...tendré que construir una muralla para 2017 😆 Y también descubrió lo divertido que era ponerse los zapatos de su padre y caminar con ellos por toda la casa. Cada vez que lo hace me entra un ataque de risa que no es ni normal, es demasiado cómico.
Y volvió a llegar Diciembre, y con él unas navidades tremendamente especiales, aunque aún queda lo mejor. Me despido con nuestro último selfie del año, pero vendrán más! Como ven mis momentos para recordar se centran en mi familia, han habido otras cosas buenas, buenísimas, gente nueva que he conocido, e-mails de seguidoras que me han emocionado, proyectos que me han ilusionado, conversaciones que me han hecho crecer...pero el primer puesto en mis momentos se lo lleva mi familia, por lo divertida que es y lo feliz que me hace.
Espero que el 2017 les traiga cosas buenas y que yo pueda seguir aquí para verlo y compartirlo! Se l@s quiere mucho y un año más, gracias por acompañarnos siempre en nuestro día a día! ¡Feliz año nuevo!