En los últimos tiempos se han convertido en tendencia las fuertes sanciones a grandes laboratorios farmacéuticos por sobornar a los profesionales sanitarios. Pfizer ha despedido a 30 altos cargos en España por “prácticas poco éticas”. También se ha confirmado otra multa millonaria a la farmacéutica Novartis en Estados Unidos (EE.UU.), por el pago de sobornos. Leed.
Los despidos se han producido tras una investigación interna ordenada desde la sede del laboratorio en Nueva York y tras recibir una denuncia de un exempleado de la compañía en España, el cual había sido despedido recientemente.
En dicha denuncia, este exempleado acusaba a sus antiguos compañeros de España de realizar prácticas comerciales con uno de sus medicamentos contrarias al código ético de la compañía.
Qué importante es que las administraciones públicas incentiven este tipo de delaciones, no como ocurre en España que el miedo guarda la viña y muy pocos empleados comerciales de farmacéuticas se atreven a denunciar. Alguno/a lo ha hecho com narro en mi libro Laboratorio de médicos pero son oos para toda la corrupción que hay en ese ámbito.
Por otro lado y casi al mismo tiempo hemos sabido que la farmacéutica suiza Novartis deberá pagar 390 millones de dólares tras el acuerdo cerrado con el Departamento de Justicia de Estados Unidos (EE.UU.), que le había acusado de pagar sobornos multimillonarios a doctores para que recomendasen sus productos a farmacias y pacientes.
El pacto fue alcanzado entre la filial estadounidense de Novartis, el Gobierno federal y más de una cuarentena de estados en un caso que tiene como base los pagos realizados por la compañía entre 2007 y 2012 para que sus productos fuesen recomendados a usuarios de los programas sanitarios públicos Medicaid y Medicare.
Novartis admitió haber realizado estos pagos, describió cómo funcionaba la trama de sobornos y aseguró que está “implementando” nuevos controles para reforzar su “compromiso con los más altos estándares de conducta empresarial ética”.
Esto es una falacia y casi siempre suele ocurrir así; reconocen su corrupción y hacen promesan que no suelen cumplirse porque los hechos se repiten y repiten.
Y me remito al informe anual de la Fundación Gates que señala que 18 de las 20 grandes compañías mundiales fueron multadas por comportamiento corrupto, marketing poco ético o incumplimientos de las normativas de la competencia.
La Fundación del hombre de Microsoft y su esposa – Bill y Melinda Gates – al que añaden su firma el departamento británico para el Desarrollo Internacional y el Ministerio holandés de Asuntos Exteriores, publicaron en los primeros meses del año el informe The Access to Medicine Index de 2014.
El trabajo destaca, entre otros aspectos, que 18 de las 20 multinacionales que analiza se apartaron de su “código ético de conducta” y tuvieron que pagar multas por anomalías o retrasos en la comercialización de medicamentos, casos de soborno o vulnerar las leyes de la competencia.
Hace poco y tras más de un año de investigaciones China multó a GlaxoSmithKline (GSK) con 379 millones por sobornos en hospitales. La noticia tiene un interés adicional, concretamente las penas de cárcel de dos a cuatro años que han impuesto al director de la multinacional y a cuatro altos cargos, pues la multa es pequeña para lo que factura el laboratorio.
En España tenemos indicios claros de que ocurre lo mismo. Las policías y las fiscalías deben actuar de oficio.
Creo que si se quiere acabar con el “targueo” de sanitarios y laboratorios se ha de proteger e incentivar, como escribo, a quienes con su testimonio sobre esa corrupción protegen la salud pública y ahorran dinero a Hacienda.
La respuesta de los responsables de Pfizer en USA es ejemplar, saben que la corrupción, animada y amparada por lo general por las cúpulas de estas compañías, es pan para hoy y hambre para mañana: se consiguen grandes beneficios pero a costa de sufrir incalculables daños en su imagen.
Las penas de cárcel a los responsables del “tarugueo” han de ser ejemplares también, así como las cantidades a satisfacer en concepto de multa, para que salga caro delinquir.
Estas noticias sacuden al mundo de los negocios en Estados Unidos y marcan el nivel de desgaste de la imagen de la industria farmacéutica en el mundo.
Pfizer toma estas duras y necesarias decisiones en un momento en el que tras su fusión con el laboratorio Allergan se ha convertido en la mayor farmacéutica del mundo.