Neveras desangradas, sombrillas ejecutadas, sillones acuchillados, sillas desmembradas… El objeticidio va más allá de lo que cualquiera puede imaginar que le pueda pasar a un objeto de uso cotidiano.
Objeticidio es una exposición que consta de unas 30 fotografías de elementos que han sufrido un trágico e intencionado final.
Esta colección pretende hacer reflexionar sobre el consumo de objetos y el final que estos reciben. Es una denuncia ante el desorbitado nivel de consumismo en el que vivimos inmersos y lo hace por mediación de la representación de la muerte.
La muerte se encuentra representada por la consistencia orgánica que emana del interior de los objetos, simulando ser sangre o vísceras. Esta personificación ofrece una visión horrible e inusual de objetos que podemos encontrar en cualquier hogar, haciendo una inevitable comparación con seres vivos.
Está claro que una exposición puede agradar más o menos al público, pero bien seguro, ésta no puede dejar indiferente al espectador. ¿Que te ha parecido? ¿Te ha impresionado ver así estos objetos?