Como los caminos, las escaleras sirven para poner en comunicación distintas partes de un parque o para dar acceso al mismo. Vamos a tratar, más bien a recordar, los aspectos más destacables a considerar, pues la mayoría son de sobra conocidos.
- Emplazamiento:
- Utilidad: que realmente la escalera sea necesaria, preste una utilidad y sea conveniente bajo todos los puntos de vista.
- Funcionalidad: de acuerdo con la función prevista, determinada por su punto de arranque y final.
- Seguridad: que el emplazamiento no suponga inseguridad para el usuario.
- Atractivo: que discurra por un lugar atractivo que invite a su utilización o desde ella se pueda disfrutar de algo, por ejemplo vistas agradables.
- Compatibilidad: con el resto de la escena o ambiente.
- Alternativas: deberemos considerar si puede evitarse la escalera o que su función sea desempeñada por otro elemento con ventaja.
- Desarrollo:
- Contra-huella o tabica: entre 12 y 16 cm, mejor no pasar de 15 cm. (La NTJ01A recomienda 14 cm, con un máximo de 16 cm.) La altura de la tabica decrecerá a medida que aumente el número de peldaños del tramo, pero no debe ser inferior a 12 cm pues por debajo de esta altura el escalón se percibe mal y se favorecen los tropiezos, también se aumenta la confianza y el peligro de caída. En áreas interiores la huella normal es de 17 cm y en áreas de servicio puede llegar a 20 cm.
- Huella: Entre 30 y 40 cm debiendo guardar relación con la altura de la tabica para que sea cómodo el tránsito por la escalera. La fórmula que asegura un cómodo tránsito es la siguiente: 2 huellas + 1 tabica = 64 cm, de ella obtenemos la siguiente tabla:
tabica huella
10 44
11 42
12 40
13 38
14 36
15 34
16 32
17 30
- Tramos: Mínimo de 3 peldaños en cualquier caso, incluso en escaleras de un solo tramo, necesario para manifestar el desnivel y no provocar confusión. Máximo de 13 peldaños con un óptimo de 7 en cada tramo, siempre referido a una altura de tabica entre 12 y 15 cm, descendiendo a medida que aumenta la altura de la tabica. Número impar o par de peldaños en combinación con el número impar o par de pasos en el rellano, de forma que cada tramo se ataque con el pie alternativo. Esta regla está especialmente indicada en escaleras de muchos tramos de pocos peldaños (menos de 5) y de rellanos cortos; en las restantes no se nota la diferente utilización de cada pie.
- Rellanos: Plataformas horizontales, también llamadas mesetas, que dividen la escalera en tramos y tienen varios cometidos: Dividir el esfuerzo de subir y bajar la escalera, permitiendo la recuperación del caminante. Para que se produzca tiene que darse al menos dos pasos en el rellano, y más si el esfuerzo del tramo precedente ha sido intenso, ya sea por el número de peldaños o por la altura de la tabica. Romper la monotonía del paso que puede originar un exceso de confianza y producir la caída, sobre todo bajando la escalera. Disminuir el peligro, tanto real como psicológico, por el miedo a atacar una larga escalera, sobre todo bajando si, además, presenta una fuerte pendiente. Encajar la escalera en la topografía existente, tanto en planta como en altura, permitiendo articular giros, derivaciones... Algunas consideraciones:
- La longitud del rellano será de n pasos + 1 huella, siendo recomendable: 2n pasos +1 huella, especialmente en escaleras de numerosos rellanos, más de cuatro. La razón de esta medida estriba en la necesidad de aportar descanso por igual a ambos pies en el rellano, por lo que debe acometerse el siguiente tramo con el pie contrario al que hizo el esfuerzo de subir el último escalón.
- Cuando la longitud del rellano aumenta, 6 o más pasos, esta medida pierde importancia, llegando incluso a desaparecer cuando el número de pasos es tal que iguala en ambos pies la sensación de cansancio, o de descanso; por el contrario es fundamental en escaleras de numerosos tramos y cortos rellanos, especialmente en la de 3 peldaños. Si consideramos que la longitud media de un paso, subiendo escaleras, es de 55 cm, un poco menos de del normal, la longitud mínima del rellano sería de 1,40 m (puede variar entre 1,30 m en escaleras pendientes a 1,50 m en las suaves).
- El ancho del rellano será, cuando menos el de la escalera, cuyo mínimo, en espacios públicos es de 1,30 m, siendo recomendable no descender de 2 m.
- Cuando el ancho es mayor de 5 m, se denominan escalinatas y en ellas decrece la altura de la tabica y aumenta la huella.
Desarrollo de escalera