Peter Copping ha sabido mantener el legado de más de 50 años que dejó hace un año el fallecido Oscar de la Renta. La pasarela se llenó de diseños regios y señoriales, con estampados florales clásicos, delicados encajes en forma de flor, juegos de volúmenes, brillantes rasos y transparencias discretas.
Una colección inspirada en la España más turística y el marsala como color predominante. El magenta, el rojo, el blanco, el negro y el ámbar también tuvieron presencia en el desfile con tintes en azul cian y verde botella. Como elemento innovador, Copping cambió los tacones para calzar a las modelos con alpargatas con pedreria.