El apellido Barrymore está indiscutiblemente ligado al poder. Sean Barrymore, fiscal del distrito de Chicago, pertenece a una de las familias más influyentes del país, y su fama de hombre de ley, duro e implacable, le ha llevado a convertirse en el candidato idóneo para ser el próximo juez de apelaciones del estado de Illinois. El éxito lo persigue, aunque sobre la expectativa de ese gran futuro profesional se cierne una sombra ominosa: un asesino que está dispuesto a todo con tal de destruirlo. Lena Petrova es una joven trapecista cuya única familia está compuesta por domadores, ilusionistas, payasos, enanos y numerosos animales. El circo Babushka acaba de instalar su carpa en la playa de Odessa, en Broklyn, para ofrecer sus funciones durante los próximo meses estivales. Preocupada por los asuntos turbios en lo que pudiera estar metido su compañero de trapecio, Lena se cruzará en el camino de Sean, y ese insólito encuentro de dos seres de mundos tan diferentes alterará para siempre las vidas de ambos.
Un cumulo de cosas fueron las que me llevaron de cabeza hacia esta lectura. Desde su portada que me enamoro sólo verla, sus criticas que hasta el momento eran muy buenas y como no la sinopsis que te deja con ganas de más. Ahora que ya he disfrutado de su lectura puedo decir que la novela ha estado a la altura y ha cumplido con todas mis expectativas.
Lena es una joven nómada que trabaja en el circo Babushka como trapecista. A simple vista se ve una persona humilde, trabajadora y con mucho carácter; pero detrás de esa fachada existe una chica cuativadora y espontánea que dice todo lo que se le pasa por la cabeza, aunque luego muchas veces se arrepienta. Ese lado de ella es el que sin duda más me ha gustado, ha sacado ese lado infantil que ha veces tenemos escondido y con el que me lo he pasado en grande, sobre todo porque dejaba en ocasiones a Sean descolocado.
Sean me ha sorprendido muy gratamente, la verdad es que cuando leí que era fiscal y pertenecía a una familia de dinero me imaginaba al típico hombre que mira por encima del hombro y que para nada se codea con gente que no sea de su entorno. A pesar de su nivel adquisitivo, de su trabajo como fiscal, de que su familia no aceptara ese cambio en su vida, Sean se arriesgado con los ojos cerrados por lo que de verdad le ha dicho su intuición, y desde prácticamente ese momento se ha ganado parte de mi corazón.
No sé si será su naturaleza nómada, o ese encanto que desprenden sus ojos; deberían prohibir que una mujer pueda decir tantas cosas con solo mirarte.
La relación entre los protagonistas va a estar llena de obstáculos en el camino, y es que dos personas tan diferentes es difícil compaginar a las mil maravillas, pero juntos irán superando malentendidos y conseguirán que su relación evolucione aunque sea muy lentamente.
Ha conseguido un equilibrio perfecto entre el suspense y el romance; sin duda ha compenetrado a la perfección los dos temas, dándole a justa medida el toque necesario a cada uno de ellos.
Oscura fascinación es una historia que te da una de cal y otra de arena, una de esas historias que te sorprende a medida que vas avanzando, y en la que conoces a personajes realmente maravillosos, y a otros que no tanto. Seréis testigos de cómo a veces dos mundos totalmente diferentes pueden estar unidos a la perfección.