En mi última visita a ikea compré algunos trapos de cocina aunque no me hacían mucha falta, pero el aspecto que tenían como los antiguos me llamó mucho la atención y acabé por comprarlos.
Dos en tonos rosas y verdes uno a rayas y otro a cuadros, pero una vez en casa me daba pena usarlos para el uso común que le damos en la cocina, como limpiarnos las manos cuando estamos cocinando, al final siempre se acaban estropeando con alguna mancha indeseable de aceite.
Así que decidí usarlos como individuales para el desayuno , y así disfrutarlos más.
Estos azules me costaron más baratos, y también me encantan porque no sueltan nada de pelusa para secar, así que unos como individuales y otros para ser usados como "trapos".
¡Feliz comienzo de semana!
Fotos: Lola Navarro