Papajotes, el dulce más socorrido de Jaén

Por Carmina @Carminaenlacoci

Papajotes dulces, de Jaén

¿Que por qué los papajotes es el dulce más socorrido? Porque es tan fácil que se hace en un pis-pas aunque no tengas nada preparado. Es ese plato que sirve tanto para desayunar como para matar un deseo irrefrenable de “algo dulce” que te pide el cuerpo ese día que precisamente no tienes nada en la recámara…

No hay pueblo en mi provincia, Jaén, que no tenga entre sus dulces típicos los Papajotes dulces, y no hay abuela que se los haya preparado a sus nietos en una de sus esperadas visitas.

En mi caso, reconozco que he hecho papajotes en más de un arrebato dulceril, y cuando tenía 15 años, en más de una noche con mis queridos vecinos y mucho más que amigos, del campo, Juan Luis y Mª Carmen, hemos terminado haciendo este dulce, indispensable para seguir jugando a las cartas, rebautizándolos como “pedorretas” (imaginaros de qué forma salían, jajaja!)

No olvides freírlos en aceite de oliva virgen extra, y no sólo para que sus componentes saludables impregnen estos papajotes, sino para que te salgan más crujientes por fuera y esponjosos por dentro, y no se empapen de grasa, ya que el aceite de oliva virgen extra forma una película que hace que no se absorba ésta. Prueba y verás.

Papajotes dulces, paso a paso

Ingredientes:

  • 250 ml de leche
  • 1 huevo
  • 1 pizca de sal
  • 1/2 sobre de levadura en polvo o uno de gaseosa “El tigre” (lo dos colores)
  • 250 gr de harina, aproximadamente
  • La ralladura de un limón (opcional)
  • 1/2 copita de anís (opcional)
  • Aceite de oliva  virgen extra, para freírlos
  • Azúcar y canela o miel, para rebozar una vez fritos

Preparación: 

Batimos el huevo y le añadimos la leche, la ralladura del limón o la copita de anís (si nos gusta el sabor)

Añadimos la sal y la levadura, y seguimos batiendo.

Vamos incorporando poco a poco la harina, aproximadamente entre 200 ó 250 g.  hasta que quede una masa cremosa espesa.

Ponemos a calentar el aceite de oliva virgen extra y cuando esté caliente, vamos echando cucharadas de masa. Ya verás cómo empiezan a subir y a darse la vuelta solos.

Una vez dorados, los sacamos y escurrimos sobre un papel de cocina.

Rebozamos con azúcar y canela, o le echamos miel y ya podemos disfrutar de nuestros papajotes.

No tengo constancia de cuánto tiempo duran… en mi casa siempre han caído de golpe, jeje. ¡QUE APROVECHE!

Te he preparado una mini video receta para que, si aún no te has animado a hacerlos, termines por salir corriendo a la cocina:

¿Te gustan las masas fritas? Pues prueba estos Rosquillos abuñolados o estos aromatizados Roscos fritos de anís, que desaparecen del plato antes de que termines de preparar el café.

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