Científicos del King's College London investigaron sobre el
papel que juega el intestino en el procesamiento y la distribución de grasas y
como esto puede allanar el camino para el desarrollo de tratamientos para la
obesidad y otras enfermedades crónicas. La investigación que se publica enNature Genetics es el mayor estudio de
este tipo, en el análisis del metaboloma fecal para construir una imagen de
cómo el intestino controla estos procesos y distribuye la grasa. El análisis de
las muestras de heces identificó biomarcadores para la acumulación de grasa
interna alrededor de la cintura. Es bien sabido que esta grasa visceral está
fuertemente asociada con el desarrollo de afecciones que incluyen diabetes tipo
2, enfermedad cardíaca y obesidad. Un análisis de los metabolitos fecales encontró
que menos del 17.9 % de los procesos intestinales podría atribuirse a factores
hereditarios, pero se encontró que 67.7 % de la actividad intestinal estaba
influenciada por factores ambientales, principalmente la dieta regular de una
persona. Esto significa que se pueden hacer cambios importantes en la forma en
que el intestino de un individuo procesa y distribuye la grasa alterando tanto
su dieta como las interacciones microbianas en su intestino, los microbios
intestinales se pueden modificar con probióticos, con medicamentos o con dietas
altas en fibra.