Otras dos palabras que causan confusión cuando se desconoce su condición de dúo travieso o cuando se usan sin cuidado son retraer y retrotraer. Una vez oí a una señora que decía:“Yo me retrotraigo pero mi marido insiste…” Y después, leyendo otra noticia, encontré:“…que se inicien los trámites para retrotraer la titularidad de la parcela al Ayuntamiento…” He aquí lo que cada una de estas dos palabras significa:retrotraer:Retroceder a un tiempo pasado para tomarlo como referencia o punto de partida de un relato.retraer:1. Retirarse, retroceder.2. Ejercitar el derecho de retracto. Retracto: Derecho que compete a ciertas personas para quedarse, por el tanto de su precio, con la cosa vendida a otro. Es decir, que ni la señora se retrotrae del marido ni al ayuntamiento se le retrotrae la parcela. Sé que puede parecer que me dedico a espulgar lo que dicen los demás para encontrar deslices e incorrecciones en su discurso. Pero lo cierto es que yo me retraigo, retrocedo ante la idea de fiscalizar cada palabra y cada frase que oigo o leo.Me esfuerzo por centrarme en el mensaje exclusivamente, sin prestar atención a su forma, pero tarde o temprano aparece una palabra que parece inadecuada en un contexto determinado; que suena inapropiada, que no parece la mejor opción para ese momento. Y entonces, sin que yo lo pueda evitar, la palabra en cuestión empieza a dar vueltas, a rondarme por la cabeza, a veces durante días, y llega a ponerse tan pesada que no me queda otro remedio que consultar diccionarios y ejemplos de uso para quitármela de encima. Es lo que me pasó recientemente, cuando vi en la tele a un periodista que hablaba con un religioso sobre la elección del nuevo Papa. El reportero, en un momento de la entrevista dijo:
“Y ahora, hablando de algo mucho más terrestre…”
Y claro, la duda era inevitable: ¿terrestre o terrenal? No olvidemos que se estaba hablando de asuntos relacionados con la religión, la fe, lo divino frente a lo mundano.
Entonces encontré en el diccionario una interesante distinción:terrestre: perteneciente o relativo a la Tierra.terrenal: perteneciente o relativo a la tierra, en contraposición de lo que pertenece al cielo. Es decir, lo terrestre es lo que se refiere al planeta Tierra, con mayúscula pues es un nombre propio; mientras que lo terrenales lo relativo a la tierra, con minúscula, a lo que no pertenece al cielo, en el sentido de “la mansión eterna de los bienaventurados”, como poéticamente lo define la RAE.Así pues, el reportero que hablaba primero de lo divino y después de lo humano, debería haber dicho, efectivamente, terrenal. Qué bonito y ventajoso es esto de que las palabras tengan su significado preciso y exacto para encajar divinamente en un contexto o en otro. Lo malo es que no siempre lo sabemos aprovechar.