Si hay un plato que me gusta son las berenjenas a la parmesana o melanzane alla parmigiana, en general cualquier receta que combine las berenjenas y el queso, por mi parte, será bien recibida.
La parmigiana es una receta tradicional italiana, realizada a base de capas de berenjena, queso parmesano y salsa de tomate con albahaca, todo gratinado hasta conseguir una costra crujiente por encima. Una receta vegetariana sencilla y que seguro que va a encantar a todos.
INGREDIENTES
3 Berenjenas.
2 Bolas de mozzarella de búfala.
1 Cuña de parmesano.
500 gr. de salsa de tomate casera.
Sal y pimienta.
- Cortamos la berenjena en rodajas de 1 cm aproximadamente, las espolvoreamos con un poco de sal y las dejamos una media hora en un escurridor para que suelten todo el líquido posible. Con ayuda de un rallador grueso, rallamos la cuña de queso parmesano. Escurrimos las bolas de mozzarella y las cortamos en tacos de 1 cm. aproximadamente.
- Vamos friendo, por tandas, las berenjenas en una sartén con aceite de oliva hasta que comiencen a dorarse y las vamos depositando sobre papel absorbente, aunque a yo prefiero hacerla a la plancha, no queda tan rica, pero resulta menos pesada de comer, ya que toma menos aceite, eso a gusto de cada uno.
- En una fuente de horno, colocamos una capa de salsa de tomate, cubrimos con una capa de berenjenas y sobre estas queso parmesano y mozzarella. Encima otra vez tomate y así hasta terminar con todos los ingredientes. Gratinamos a 180ºC durante unos 20 min. o hasta que comience a dorarse.
Como veis la preparación es muy sencilla, sería similar a la lasaña, pero con capas de berenjena en lugar de pasta. La salsa de tomate es sencilla de preparar en casa y el resultado es inmejorable, para ello, tomaremos un kilo de tomates pelados y troceados, 1 cebolla y un buen manojo de albahaca. En una sartén, pochamos la cebolla hasta que comience a dorarse, añadimos los tomates, la albahaca, salpimentamos, añadimos una pizca de sal y dejamos cocer unos 40 min, removiendo de vez en cuando. Retiramos cuando veamos que el tomate está frito. Rectificamos de sal y lista para utilizar.
El queso que sea de buena calidad, sobre todo la mozzarella de búfala, no uséis esa que venden rallada y que no tiene casi sabor, seguro que quedaría rica también, pero nunca estará igual, lo mismo que el parmesano, es mejor tener una cuña en casa para rallar cuando sea necesario.
Este plato lo podéis realizar con antelación, incluso el día antes, solo lo tendréis que calentar unos minutos en el horno antes de tomar y listo. Si lo dejáis reposar, los sabores se mezclarán mucho mejor y quedará todo más compacto en el momento de servir, sin duda es recomendable prepararla antes.
Esta receta es estupenda para cuando tenemos invitados, nadie puede resistirse a una buena parmigiana di melanzane, y al ser sencilla de preparar, no tendremos que preocuparnos de la comida y podremos centrarnos en otras cosas, y sobre todo, disfrutar de la velada.
Espero que os animéis a prepararla, las berenjenas siempre son un acierto en la mesa, y como os decía, con queso, mucho mejor.