El jardín fue construido en 1956, por Ramón Ortíz, jardinero Mayor de la Villa, se encuentra situado en la parte más baja de los jardines del Parque del Oeste, muy cerquita del Templo de Debod, que también os recomiendo visitar, más que nada por lo curioso que resulta ver un trozo de Egipto en Madrid.
El jardín está organizado en parterres, algunos de ellos dedicados a las nuevas rosas que participan en el concurso y otros a las más de 500 variedades de rosas, dentro de los 16.000 rosales que existen en el jardín.
Lo que más me llamó la atención cuando estuve visitando la rosaleda, fueron los rosales Banksiae, cubriendo las pergolas colocadas en los laterales del Parque. Me llamaron la atención por lo impresionantes que son (muy grandes), pero he de reconocer que me lo pasé de maravilla, reconociendo las muchas rosas que antes había descubierto en mi enciclopedia de las rosas y a los distintos cultivadores.
Es un sitio ideal para pasear una tarde de primavera, además dentro del Concurso Intenacional de Rosas Nuevas, los visitantes tienen unos días que pueden votar a la rosa que más les gusta, y esta recibe un premio especial. Otros años, los visitantes que emiten su opinión, tienen la posibilidad de ser también premiados con uno de los rosales que se sortean entre los participantes.
Si te animas, ya sabes puedes visitar El Parque de la Rosaleda de Madrid, dentro del Parque del Oeste.