Muchas veces he hablado por aquí de las maravillas de la pasta al horno y de lo mucho que nos gusta en casa. Hoy traigo una versión de la pasta con salchichas italianas y crema de calabaza. Especiando la soja texturizada con las mismas especias nos queda un resultado realmente delicioso y que nada tiene que envidiar a su versión con carne. Una receta rápida, sencilla y con un resultado espectacular.
INGREDIENTES
200 gr. de pasta al gusto.
1 calabaza pequeña.
100 gr. de soja texturizada.
1 cebolla.
2 dientes de ajo.
100 ml. de caldo de verduras.
50 ml. de vino blanco.
1/2 cucharadita de canela.
1/2 cucharadita de comino en grano.
1/2 cucharadita de clavo en polvo.
1 hoja de laurel.
Una pizca de nuez moscada.
Tomillo y perejil fresco.
Queso parmesano en polvo.
Aceite de oliva, sal y pimienta.
- Comenzamos pelando y troceando la calabaza. La ponemos en una bandeja de horno con un poco de aceite, sal y pimienta y la horneamos a 180ºc durante 20 minutos. Una vez que la tengamos bien asada, con ayuda de un robot de cocina la batimos con la mitad del caldo hasta obtener una crema densa y homogénea. Reservamos.
- Colocamos una sartén grande en el fuego y salteamos la cebolla cortada en juliana, el diente de ajo y la hoja de laurel. Una vez que comience a dorarse, añadimos la soja texturizada y las especias (canela, clavo, comino y nuez moscada) removemos bien y cocinamos unos 5 minutos o hasta que veamos que la soja texturizada comienza a tostarse. Cubrimos con el vino y cocinamos unos 5 minutos o hasta que se evapore todo el alcohol.
- Añadimos el resto del caldo de verduras, la crema de calabaza y mezclamos bien. Ponemos una olla al fuego con abundante agua salada y preparamos la pasta según instrucciones del fabricante. Una vez lista, la escurrimos y añadimos a la salsa de calabaza. Mezclamos bien y añadimos un poco de perejil y tomillo frescos. Salpimentamos y mezclamos bien.
- Lo pasamos todo a una bandeja de horno , cubrimos con el parmesano y horneamos unos 15 minutos a 180ºC o hasta que veamos que comienza a dorarse. Servimos con un poco más de tomillo y perejil frescos por encima.
Una receta sencilla y super aromática. No os hacéis una idea de lo bien que huele toda la cocina mientas las especias se cocinan y la salsa se cocina con la crema de calabaza. Os aseguro que es un gustazo poder disfrutar, no solo del plato en la mesa, sino de todas las sensaciones del cocinado. Estaréis deseando que se dore y poder sacarla del horno para probarla.
Si queréis la versión con salchichas frescas, lo primero que haréis será sacar la carne de la salchicha y dorarla al fuego. Se retira la salchicha y en el mismo aceite se dora la cebolla con los ajos. Se añade a la vez que la crema de calabaza. Las especias podéis poner un poquito menos, ya que la carne va muy especiada en ese tipo de salchichas.
La receta tiene una cremosidad increíble y admite perfectamente todas las hierbas frescas que tengáis por casa, salvia, orégano, romero.. esto nos aportará a la salsa un toque extra de frescor y aroma. En casa cada vez usamos más las hierbas frescas, no solo quedan bonitas, sino que su sabor es más intenso y refrescante.
Os recomiendo un buen vino blanco para el cocinado, y luego disfrutar de el mientras te tomas el plato. Me encanta cocinar con el mismo vino que se va a servir en la mesa, los sabores de todo se integran mucho más sabroso. Sin duda que la experiencia merece la pena, probadlo ;)
Espero que os animéis a preparar esta receta, os aseguro que os va a encantar.