El domingo hice un pollo relleno de jamón y queso y sobró un tercio de pollo con su correspondiente guarnición y como aquí no se tira nada, lo he reciclado haciendo este pastel de carne que quiere recordar el pastel de cierva murciano, evidentemente la textura de la masa no será la misma, porque al no llevar harina de trigo, no puede quedar igual, pero tengo que decir que aunque se puede mejorar la mezcla de harinas para mejorar algo la textura, estaba muy bueno.
Para preparar la masa unir la manteca, el azúcar o eritritol y la sal. Cuando estén a punto de pomada añadir el huevo y la raspadura de limón y, finalmente, las harinas y el bicarbonato, como quedaba un poco seca le he añadido 60 gr. de la guarnición que le puse al pollo. Dejar reposar la masa 1/2 hora en la nevera.
Mientras, preparar el relleno de carne y huevo cocido. Del pollo sacar las mollas de carne, limpias de pieles y cartílagos, y los huevos trocearlos.
Transcurrida una media hora de reposo de la masa, estirarla para forrar el molde, dividir la bola en dos mitades, yo la de la base la he estirado con las manos sobre el molde forrado con papel . Sobre la base echar la carne, el huevo y el caldo para que quede más jugoso (yo le he puesto los restos de la guarnición del pollo relleno al horno, cebolla y membrillo), ya que al quedar tapada el relleno necesita algo de humedad para no quedar muy seco.
Tapar la masa con el resto de la masa estirada, esta vez lo he hecho estirándola con el rodillo entre 2 papeles de horno, pintar con huevo batido la superficie y cocer con el horno precalentado a 200ºC, bajar la temperatura a unos 180ºC, hasta que se ha dorado la masa, en mi horno ha tardado 1/2 hora.
Dejar enfriar el pastel y ya estará listo para servir.