Su piel dura me ha encantado como cobertura del pastel, es un rico y semicrujiente contraste con la húmedad, cremosidad y jugosidad que le aporta la pulpa al interior del mismo.
Y antes de que se me olvide de nuevo, os dejo el enlace de la entrevista que me hicieron en "Rebañando" por si os interesa echarle un vistazo. Solo teneís que pinchar dicho enlace.
- 250 grs de harina.
- 190 de azúcar.
- 5 manzanas Reineta
- 1 vaso de aceite de oliva.
- 3 huevos.
- 1 sobre de levadura Royal
- 2 cucharadas de nueces troceadas.
- 2 cucharadas de nueces molidas.
- 1 cucharadita rasa canela.
- Azúcar moreno.
Preparación:
- Tamizamos la harina con la levadura en un bol grande y formamos un huevo en el centro.
- Batimos los huevos con el azúcar hasta que blanqueen y doblen su volumen.
- Los añadimos a la harina, la nuez molida, la canela, y seguidamente vertemos el aceite. Mezclamos hasta obtener una masa homogénea.
- Precalentamos el horno a 180º.
- Pelamos tres de las manzanas y las cortamos en láminas finas retirándoles el corazón.
- Las incorporamos a la masa anterior y volvemos a mezclar todo el conjunto de nuevo.
- Forramos un molde desmontable con papel de horno y vertemos la masa.
- Alisamos la superficie con una espátula y horneamos unos 20 minutos.
- Pasado ese tiempo retiramos el pastel del horno y le repartimos por encima las dos manzanas restantes, previamente lavadas , cortadas en láminas y sin pelar.
- Espolvoreamos con las nueces troceadas, un poquito de canela y azúcar moreno.
- La introducimos de nuevo en el horno y acabamos de cocerla durante otros 20 - 25 minutos más.
- Dejarla enfríar del todo, desmoldar y servir.