Ingredientes: 180 g harina; 180 g miel de lima; 180 g almendra (sin pelar); pimienta; 1 cucharada AOVE; piel de 1/2 limón.
Preparación: Cortar la piel del limón con un pelapatatas de forma que no nos llevemos la parte blanca que amarga. Picar muy bien la piel y reservar. En un bol grande poner la harina y hacer un hueco en medio.
En una sartén poner a calentar la miel a fuego suave para que se vuelva líquida. Yo he usado una que compré la última vez que visité el jardín japonés en La Haya en una pequeña tienda que hay en el parque y que fabrican una miel casera que es una maravilla...y os lo dice alguien que nunca ha sido fan de la miel.
Añadir la piel de limón, el aceite y un poco de pimienta recién molida y mezclar bien. Añadir la almendra sin pelar y entera y mezclar muy bien. Añadir al centro de la harina y primero con una cuchara y luego con las manos mezclar bien amasando hasta obtener una masa homogénea que no se pega a las manos. Es probable que tengáis que poner alguna harina adicional en las manos para acabar de darle forma.
Dar forma alargada (unos 5 cm de ancho y 1 cm de alto) y colocar encima de la bandeja del horno forrada con papel sulfurizado.
Hornear a 180 ºC (calor arriba y abajo sin ventilador) durante 20 minutos (cuando lo veáis dorado). Sacar del horno y aún caliente (ayudaros con un trapo de cocina limpio por encima del rulo) ir cortando tiras de un dedo de ancho que dejareis enfriar en la misma bandeja antes de consumir. Al enfriar se endurecen bastante (¡cuidado con los dientes!) pero yo aconsejo meterlos en el microondas 10 segundos antes de consumirlos ya que están calentitos y masticables 😀
Los pepatelli se llaman así por la presencia de pimienta (pepe en italiano) en la masa. Son dulces tradicionales de Navidad típicos de la ciudad y provincia de Teramo (Abruzzo), aunque ya se pueden encontrar en muchas otras localidades meridionales. A mi me recuerdan mucho en la forma a los carquinyols aunque en su elaboración se utilizan otros ingredientes. En cualquier caso, con un licorcito o un vino dulce pueden hacer que tu sobremesa sea perfecta.
Y ahora vamos con las propuestas de las participantes, a ver dónde nos llevan. ¡Como siempre GRACIAS!
Nos despedimos hasta el año que viene que retomaremos el reto pero ahora nos tomamos un descanso para disfrutar las fiestas en familia. ¡Os deseo unas Felices Fiestas!