"Si se quiere retrasar la maternidad, conviene plantearse la preservación de óvulos hacia los 35 años", afirma Pere Barri, nuevo presidente de la Sociedad Internacional de Preservación de la Fertilidad
Pere N. Barri, director del departamento de obstetricia, ginecología y reproducción del USP Institut Universitari Dexeus, ha sido nombrado presidente de la Sociedad Internacional de Preservación de la Fertilidad (ISFP) en el último congreso de la organización, celebrado en Miami (EE.UU.). Su misión al frente de la sociedad científica priorizará la formación de médicos para que las técnicas de preservación de fertilidad lleguen a todas las personas que puedan beneficiarse de ellas.
¿Qué es preservar la fertilidad?
Consiste en obtener óvulos, tejido ovárico, semen o embriones y conservarlos a baja temperatura. Su objetivo es que personas con riesgo de perder su fertilidad puedan tener hijos más adelante.
¿Para quién está indicado?
Inicialmente estas técnicas se desarrollaron para pacientes jóvenes con cáncer, después de los tratamientos de quimioterapia o radioterapia, que sigue siendo el principal motivo por el que se utilizan.
¿Hay otros motivos?
También se aplican en enfermedades distintas del cáncer. Por ejemplo, enfermedades autoinmunes como el lupus o la esclerosis múltiple si se tratan con fármacos que lesionan los ovarios. Y después está el caso de mujeres que desean retrasar la maternidad por motivos laborales o porque esperan a encontrar la pareja adecuada para tener hijos.
¿Le parece bien medicalizar la reproducción por razones no médicas?
Si una mujer viene a la consulta y me dice: 'Quiero tener hijos pero no puedo permitírmelo en este momento, ¿qué puedo hacer?', mi obligación es informarle de las opciones que tiene y, si está indicado en su caso, ofrecerle un tratamiento de preservación de la fertilidad.
¿Hasta qué edad está indicado hacer este tipo de tratamiento?
Sabemos que, en mujeres, la fertilidad suele tener un declive importante entre los 35 y los 40 años. Por lo tanto, si se quiere retrasar la maternidad, puede ser conveniente plantearse la preservación de óvulos hacia los 35 años. En el caso de personas jóvenes con cáncer, estos tratamientos deben ofrecerse a todas aquellas que pueden quedar infértiles independientemente de la edad.
¿Cuántas personas han recibido estos tratamientos en Dexeus?
Noventa y seis. De ellas, 64 son mujeres con cáncer; 16, personas con otras razones médicas, y 16, mujeres que retrasan la maternidad por causas sociales.
¿Y cuántos embarazos se han registrado gracias a estos tratamientos?
Cuatro en nuestro centro y 18 en el conjunto del mundo.
¿Es necesaria una sociedad científica internacional para un tipo de tratamiento que es minoritario?
Es minoritario pero va a más, tanto por causas médicas como sociales. Si pocas personas se han beneficiado hasta ahora de estos tratamientos, es porque se han introducido hace pocos años. Pero muchas personas podrán beneficiarse de ellos en el futuro. Solo en España se registran 12.000 casos de cáncer al año en niños y adolescentes, la gran mayoría de los cuales se cura y desearán tener hijos más adelante. Un 5% de los cánceres de mama tratados en Dexeus afectan a mujeres menores de 36 años. Uno de los retos que tenemos es lograr que los tratamientos de preservación de fertilidad lleguen a todas estas personas.
¿Los oncólogos son receptivos?
Una reacción habitual entre oncólogos es decir: 'No hay tiempo, esta chica tiene que empezar la quimioterapia el lunes'.
¿En estos casos no hay opción de preservar la fertilidad?
En estos casos hay que enseñar que siempre se puede hacer algo. Si la quimioterapia puede esperar una semana, se pueden extraer óvulos. Si la quimioterapia no puede esperar, se puede extraer tejido ovárico, que es más rápido.
¿Hay tensiones entre ustedes y los oncólogos?
Los oncólogos, como nosotros, buscan lo mejor para sus pacientes. Pero, como las técnicas de preservación de la fertilidad son un avance reciente, hay oncólogos que no están suficientemente informados sobre ellas y sobre los circuitos para derivar a los pacientes. Resolver esto será una de mis prioridades como presidente de la ISFP.