La nueva acción de la asociación de productores pesqueros tiene como objetivo exponer la realidad y derribar los falsos mitos que existen en torno a este arte de pesca tan relevante para nuestro país. La flota pesquera española ha incorporado diferentes avances tecnológicos para minimizar el impacto en el fondo marino y mejorar la selectividad de las especies
La pesca de arrastre es uno de los temas que más interés y debate generan en relación con el sector pesquero, pero a la vez está marcado por una gran desinformación generalizada y la aparición de mitos sin contrastar y ‘fake news’. Por ello, Pesca España, la asociación formada por algunas de las más importantes Organizaciones de Productores Pesqueros de nuestro país, lanza ‘La huella positiva’, su nueva campaña centrada en exponer la realidad de este arte de pesca y desmontar algunos de los mitos que rodean a esta técnica que han ido adquiriendo peso entre la opinión pública e incluso las instituciones.
El sector pesquero español, que representa el 20% de la producción de la UE, trabaja actualmente bajo la continua amenaza de nuevas normativas que limitan cada vez más su actividad y, en especial, el arte del arrastre. «Se presenta un futuro incierto por la presión regulatoria de la Comisión Europea, influida por la creciente presión de los grupos ecologistas que no tienen en cuenta los argumentos científicos que avalan el trabajo sostenible y responsable de la flota pesquera. Mediante nuestra campaña ‘La huella positiva’ queremos afrontar, con rigor y transparencia, la realidad de la pesca de arrastre y los grandes mitos que existen en relación con este arte de pesca y que, lamentablemente, gran parte de la ciudadanía ya ha asimilado», explica Javier Garat, presidente de Pesca España.
Mitos y realidades de la pesca de arrastre
Los caladeros donde se practica el arte del arrastre están muy delimitados y controlados, siendo siempre los mismos, año tras año. Los buques faenan en fondos de arena y fango, parecidos a los campos de cultivo, con un impacto mínimo en los ecosistemas. «Después de décadas faenando en los mismos lugares vemos como, por ejemplo, en el Atlántico Nordeste, la gran mayoría de las poblaciones de peces se explotan en niveles de rendimiento máximo sostenible. Esto indica que no se está destruyendo nada y que las pesquerías se mantienen en un estado saludable», apunta Iván López van der Veen, presidente de EBFA.
La pesca de arrastre tiene un gran peso en la flota europea y es una fuente de desarrollo económico y social. En concreto, se está hablando de 7.000 barcos (887 españoles) que dan empleo a 20.000 pescadores suponiendo el 35% de la capacidad pesquera de la Unión Europea y el 38% de los ingresos de la pesca a nivel comunitario.
En lo que respecta a las especies, hay muchas de ellas que sólo se pueden capturar mediante este tipo de arte de pesca (o con otros, pero en cantidades pequeñas), pescados y mariscos como el lenguado, la acedía, el gallo, el fletán negro, el rape, el congrio, el salmonete, la gamba, la cigala, la galera, el langostino, la puntillita, la sepia o el calamar. Además, con el arte de arrastre se pescan otras especies importantes como la merluza, el bacalao, la bacaladilla o la pota. Se trata de la mayoría de las especies mejor valoradas y consumidas por la población de nuestro país, por lo que la amenaza constante a la pesca de arrastre supone un ataque directo a la soberanía alimentaria de la Unión Europea.
Mínimo impacto ambiental y mayor sostenibilidad
Como parte del esfuerzo continuo por seguir mejorando e innovando, los barcos de arrastre incorporan numerosas tecnologías que ayudan a identificar y seleccionar las zonas de pesca, mejorar la selectividad en las capturas y la eficiencia energética. Sistemas como las puertas voladoras «permiten un mayor control de la profundidad y la posición de las puertas con respecto al aparejo gracias a los sensores presentes en ellas, lo que redunda en un impacto mínimo en el fondo marino, ayudando a la reducción de las emisiones al favorecer la eficiencia en el consumo de combustible» añade José María Gallart, gerente de la OPP 71 de Almería.
Desde Pesca España y con campañas como ‘La huella positiva’, «queremos dar a conocer a todos los españoles cómo funciona realmente la pesca de arrastre, cuál es su finalidad y su verdadero impacto en la biodiversidad marina. El sector pesquero español es el principal guardián del mar, y seguiremos poniendo de manifiesto nuestro compromiso con la sostenibilidad y el cuidado y respeto de los mares y los ecosistemas«, concluye Garat.
Fuente Comunicae