Pintura macroesquemática, denominada también arte lineal-figurativo, arte contestano o arte cardial, se trata de una manifestación pictórica rupestre que tuvo lugar durante el V milenio a. C. en la península Ibérica, y que fue conocida desde 1980 a raíz de los hallazgos de M. Hernández y el Centre d´Estudis Contestans en el roquedo alicantino de Pla de Petracos (Castell de Castells). Realizado en abrigos poco profundos, caracterízase por el empleo exclusivo de pintura roja de diversas tonalidades, con la que se plasman figuras humanas —los llamados 'orantes' de cabeza circular, brazos en alto y cuerpo alargado—, además de distintos temas geométricos, serpentiformes sobre todo, concebidos siempre con un acusado esquematismo. La presencia del motivo de los orantes en la decoración de las cerámicas cardiales valencianas ha permitido atribuir este arte a los primeros grupos neolíticos regionales, lo que justifica su difusión un tanto restringida al Levante peninsular.