Rejuvenecer la piel y hacer eliminar las arrugas de la cara puede conseguirse con muchos tratamientos. Uno de los más efectivos es el que hace uso del plasma rico en plaquetas.
El plasma rico en plaquetas se consigue de la sangre del paciente. Tras su extracción se produce un centrifugado del que queda resultante este plasma rico en plaquetas, muy utilizado en medicina regenerativa.
Al proceder del propio paciente, lo convierte en una sustancia autóloga totalmente compatible y segura. Además, si el tratamiento se realiza mediante un circuito cerrado no existirá riesgo de contaminación, explican desde Sebbin, laboratorio distribuidor del sistema para la utilización de plasma rico en plaquetas.
Uso del plasma rico en plaquetas para las arrugas
El plasma rico en plaquetas cada vez se usa más en medicina estética con multitud de fines estéticos. Uno de ellos es acabar con las arrugas que aparecen en el rostro, comentan desde Sebbin.
El tratamiento de plasma rico en plaquetas podrá sufrir algunas variaciones según se quiera corregir:
- Envejecimiento cutáneo y arrugas finas.
- Arrugas finas y líneas de expresión.
- Arrugas profundas y pliegues.
La aplicación del tratamiento con plasma rico en plaquetas variará en función del objetivo que se persigue con él. El especialista valorará también cómo tendrá que realizarse. Existen distintas posibilidades: inyecciones intradérmicas, tópicas, directamente sobre el tejido en las operaciones, etc.
Para tratar las arrugas lo más habitual es que el plasma rico en plaquetas se aplique mediante inyecciones en la zona que se necesita mejorar.
Los resultados son muy buenos. Está más indicado en personas que buscan atenuar los signos del envejecimiento, como las arrugas, y no tanto su desaparición completa. Esto hace que el aspecto sea muy natural.