RECETA Nº 294 - POLLO CON CHAMPIÑONES PORTOBELLO
INGREDIENTES
- 2 kg de muslos y contra muslos de pollo amarillo
- 1 kg de champiñones portobello cortados en cuartos
- ¾ tz aceite de oliva
- 25 gr mantequilla
- 2 cebollas pequeñas o 5 chalotas picadas muy fino
- 4 dientes de ajo laminados
- 2-3 ramitas de tomillo fresco
- 125 ml vino blanco seco
- 80 ml brandy
- 500 ml nata líquida para cocinar
- Sal
- Pimienta negra recién molida
- Hojas de perejil o unas ramitas de tomillo fresco para decorar (opcional)
PREPARACIÓN
1. En una cazuela amplia calentamos a fuego medio alto el aceite de oliva y doramos bien nuestras piezas de pollo previamente salpimentadas. Reservamos aparte.
2. Bajamos el fuego a medio y en la misma cazuela añadimos la mantequilla y sofreimos la cebolla picada con los ajos laminados.
3. Cuando estos cojan color dorado agregamos el brandy y flambeamos, recuerda apagar tu campana extractora al flambear, al no hacerlo corres el peligro de provocar un incenido si las llamas contactan con restos de grasa a altas temperaturas en el ducto de la campana.
4. Una vez evaporado el alcohol y sin fuego, agregamos el vino blanco y removemos unos minutos para evaporar bien el alcohol y dejamos reducir al menos unos 5 minutos.
5. Añadimos nuestros champiñones y el tomillo, salpimentamos y sofreímos bien otros 5 minutos más.
6. Agregamos el pollo nuevamente con todos los jugos que ha ido soltando, removemos y echamos la nata líquida en la cazuela, bajamos el fuego, tapamos y dejamos cocinar unos 6-8 minutos.
8. Apagamos el fuego, dejamos reposar 10 minutos, decora con hojitas de perejil y servimos.
Puedes regular el grosor de tu salsa con ayuda de un poco de caldo de pollo, con los jugos que sueltan tanto el pollo como la cebolla, más los líquidos que añadimos debería ser suficiente para obtener una salsa cremosa pero no espesa, pero como en cocina no siempre los ingredientes reaccionan igual y depende también de tu gusto, esta puede ser una buena solución. Una xcelente idea para hacer este plato es usar aceite de trufa, le imprime un aroma y profundidad al plato que lo elevan un par de escalones por encima del cielo, una verdadera locura, si te gusta la trufa claro.