Yo creo que la primera receta que debí cocinar con chocolate (más bien cacao en polvo) fue el tiramisu...¡y ya estaba trabajando en Italia! Con los años me he aficionado a usarlo más y, aunque lo negaré todo, os diré que con el café después de comer si que me apetece algún bomboncillo jejejejeje.
Había visto algunas recetas en las que usaban el chocolate que eran saladas así que me he animado a preparar este pollo con una salsa a base de chocolate pero que para nada lo parece, al menos en el sabor. ¡Os va a encantar!
Ingredientes: 1 cebolla; 2 dientes ajo; 1 cucharadita pimentón; 1 cucharadita comino molido; 1/2 cucharadita canela; 1/2 cucharadita guindilla molida; 2 clavos; 400 ml caldo; 100 g ketchup; 370 g pechuga de pollo; 75 g chocolate negro; almendra fileteada; aceite; sal; pimienta; cilantro fresco.
Preparación: En una cacerola poner unas cucharadas de aceite y sofreír la cebolla y el ajo pelados y picados a fuego suave. Añadir el pimentón, el comino, la canela, la guindilla y los clavos de olor y mezclar bien durante unos minutos. Añadir el ketchup y el caldo, mezclar bien y dejar cocinar a fuego suave.
En una sartén aparte poner unas cucharadas de aceite y rehogar el pollo, cortado en dado y salpimentado, hasta que esté dorado. Sacar y reservar.
Añadir el chocolate rallado a la salsa, dejar que se funda y triturar toda la salsa con la batidora. Añadir el pollo a la salsa y dejar cocinar durante 5 minutos a fuego suave para que no se queme el chocolate.
Servir el pollo con la salsa y espolvoreado con almendra fileteada (al gusto) acompañado de arroz cocido. Espolvorear por encima cilantro fresco picado. ¡Riquísimo!