(Euronews, 15/08/2010)
El Ejército polaco está investigando una grabación en la que varios de sus soldados explosionan una casa afgana abandonada sólo para divertirse. De ser cierto lo que insinúa el vídeo, en el que un militar exclama “¡Qué bonito! entre risas de sus compañeros, los implicados habrían violando la Convención de Ginebra y podrían ser condenados a 8 años de prisión.
Pero antes “hay que escuchar su versión de lo ocurrido”, aclara el coronel Piotr Lukasiewic. “Sólo entonces se podrá decir si las reglas militares se violaron durante esa misión”.
Las imágenes, que fueron grabadas entre octubre de 2009 y el pasado mes de abril, suponen un duro golpe para la imagen del contingente polaco desplegado en Afganistán, que cuenta con más de 2.500 efectivos. Destruir viviendas civiles sin necesidad, aunque estén abandonadas, es un crimen de guerra.