¿Popeye tenía razón?

Por Antiox @joniaconsulting
Somos muchos los que hemos crecido viendo como Popeye le daba de guantazos a Brutus, gracias a la fuerza sobrehumana que le daban las latas de espinacas que tomaba.
Un gran argumento que nuestras madres usaban para hacernos comer esas nutritivas hojas que tanto nos costaba tomar de pequeños.
¿Son realmente son ciertas todas las virtudes que se les atribuye a las espinacas?
En los años 30 el dibujante Max Fleischer crea a Popeye mítico personaje que comía espinacas para multiplicar su fuerza y salvar a Olivia de las fechorías de Brutus. Pero las exageraciones atribuidas a las espinacas estaban basadas en la creencia popular de que esta verdura tenía un alto contenido en hierro. Así,
los dibujos de Popeye fueron utilizados por las autoridades sanitarias como reclamo para popularizar el consumo de espinacas.
Sin embargo, años después se vió que había un pequeño error derivado de una traducción errónea del estudio sobre las espinacas del científico alemán E. Von Wolf publicado en 1870. Se colocó mal la coma de los decimales, de forma que la cantidad fue multiplicada por error diez. Sin embargo, el descubrimiento de este error no consiguió acabar con el mito de POPEYE atribuido a las espinacas.
De hecho los datos actualizados atribuyen a esta verdura una cantidad de 4 miligramos de hierro por cada 100gr. de producto. No obstante, sigue siendo un alimento con interesantes características como la vitamina A, C y E, están compuestas en un 93% de agua, aportan una gran cantidad de nutrientes y tienen muy pocas calorías. Se la atribuyen propiedades anticancerígenas, cardiosaludables y antianémicas.

En siguientes post hablaré de las increibles propiedades de las espinacas y su capacidad antioxidante.