Quizá habréis oído alguna vez a alguien que os ha dicho que el método Pilates no le gusta o no le va bien porque (por ejemplo) ”le duele más la espalda”. Nada más lejos de la realidad..!!
Una sesión adaptada a las necesidades de cada persona (hasta en periodos de recuperación de alguna lesión) y siempre impartidas a nivel individual por un monitor especializado o fisioterapeuta puede ser de gran ayuda para la salud.
El método Pilates fue ideado por Joseph Pilates a principios del Siglo XX, y consiste en un sistema de entrenamiento físico y mental. Este método está basado en distintas especialidades como gimnasia, traumatología, ballet o yoga, uniendo el dinamismo y la fuerza muscular con el control mental, la respiración y la relajación. Aunque el método Pilates se ha desarrollado y ha dado lugar a una gran cantidad de estilos y aplicaciones distintas, existen seis principios fundamentales que deben estar siempre presentes:
Alineamiento
Centralización
Concentración
Control
Precisión
Fluidez
Respiración
El método Pilates se basa en la corrección de las posturas que afectan a músculos y articulaciones y que van adquiriéndose al sentarse, caminar o trabajar en una posición poco adecuada. Pero para disfrutar de sus beneficios, según explica el creador de la técnica, Joseph Pilates en su libro “Tu salud” es necesario: “comprender al menos algunos de los principios subyacentes más rudimentarios que regulan el mecanismo del cuerpo humano en movimiento, en reposo y durante el sueño. Por ejemplo: las posibilidades del apalancamiento de los huesos que forman el armazón del esqueleto, el alcance y los límites de la correcta tensión y relajación muscular, las leyes del equilibrio y de la gravedad, y por último, como inhalar y exhalar, es decir, respirar correctamente“.
Por consecuente, la practica regular “bien hecha” (con conciencia) de una serie de ejercicios de Pilates proporciona:
1.- Control sobre los abdominales y la respiración
2.- Corregir la postura
3.- Coordinación de los movimientos (psicomotricidad)
4.- Estabilidad del tronco y la pelvis
6.- Mejorar el equilibrio muscular
7.- Obtener una musculatura fuerte y tonificada
8.- Movilizar la espalda
9.- Prevenir lesiones de la columna
10.- Aliviar los problemas de huesos y articulaciones
11.- Controlar dolores de espalda
12.- Mejorar la circulación
13.- Moldear glúteos y eliminar la celulitis
14.- Combatir el estrés
15.- Fomentar la autoestima y la energía
Cada uno de los diferentes ejercicios están fundamentalmente compuestos por movimientos controlados, muy conscientes, y coordinados con la respiración, con el fin de crear un cuerpo armonioso, flexible y alineado.
Cuando hablamos de una “práctica bien hecha”, nos referimos a que los ejercicios están fundamentalmente compuestos por movimientos controlados, conscientes, y coordinados con la respiración, con el fin de crear un cuerpo armonioso, flexible y alineado. Pero eso no es fácil cuando nos disponemos a realizar una sesión de Pilates en la que hay más de veinte o treinta asistentes por monitor. (He llegado a ver sesiones ultramaratonianas de Pilates). No. Eso no es beneficioso. ¿Por qué? A no ser que ya tengáis experiencia en la realizacion de las diferentes series de ejercicios, es fácil que la postura de base, ya sea en los hombros, lumbares o abdomen no sean las correctas, lo que podría llegar a provocar alguna sobrecarga o contractura muscular. ¿Y cómo se puede evitar? Intentando acudir a clases o sesiones en las que como mucho hay cinco o seis personas por monitor. De esta manera, os podrá ir corrigiendo los errores de postura o ejecución de los ejercicios que se vayan dando a lo largo de la sesión.
¿Y vosotros? ¿Habéis realizado alguna sesión de Pilates? ¿Dónde? ¿Estáis contentos con los resultados? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!!!
Besos desde mi blog!!!