Por qué se ronca
Roncar es un trastorno del sueño muy común que afecta a millones de personas en el mundo. Un 45 % de los adultos normales ronca al menos ocasionalmente, y un 25 % lo hace de manera habitual. Los problemas con ronquidos son más frecuentes en los hombres y en personas con sobrepeso, y por lo general empeora con la edad. El ronquido ocurre cuando se obstruye la circulación del aire en los pasajes ubicados detrás de la boca y la nariz. Es la manifestación ruidosa de la vibración producida por el choque entre el paladar blando y la úvula (campanilla) cuando el aire que ha de pasar por la parte posterior de la boca y la nariz no encuentra el camino libre. El roncar no es una enfermedad, pero sí perjudica de manera notable el descanso y constituye una alarma de que algo no funciona como debería.Las personas que roncan pueden sufrir de:
Tonicidad muscular pobre en la garganta y la lengua. Cuando los músculos están demasiado relajados, ya sea por la ingesta de alcohol como por drogas que producen sueño, la lengua cae hacia atrás en los pasajes aéreos o los músculos de la garganta se trasladan desde los lados hacia el pasaje aéreo. Esto también puede ocurrir durante el sueño profundo
Hinchazón excesiva de los tejidos de la garganta. Los niños que tienen adenoides y amígdalas grandes, por lo general roncan. Las personas con sobrepeso también poseen hinchazón de los tejidos del cuello.
Vías aéreas nasales obstruidas. Una nariz que está tapada necesita hacer un esfuerzo extra para que el aire circule. Esto produce un vacío exagerado en la garganta y une los tejidos que la componen, produciendo los ronquidos. Por lo tanto, éstos sólo ocurren cuando se tiene fiebre o cuando se está resfriado.
Las deformidades de la nariz. Por ejemplo, una deformación del tabique que separa una ventana de la nariz de otra también puede producir una obstrucción semejante.
Muchas veces el ronquido esconde la apnea obstructiva del sueño, una patología que eleva el riesgo de muerte cardiovascular debido al perjuicio que supone para el organismo quedarse privado de oxígeno en intervalos regulares y repetidos durante el descanso.
El ronquido, al cual se lo suele tomar a la ligera, es un problema serio. Los médicos indican que el ronquido eleva la tensión arterial, el riesgo de infarto, accidente cerebrovascular, cefaleas, etc. Por lo que es conveniente abordar este problema apenas se inicia. A veces, hay que extirpar unas amígdalas o unas vegetaciones (adenoides) demasiado grandes -aunque este caso no es frecuente en adultos-, y en otras es suficiente con reducir el consumo de alcohol y tabaco, perder peso y corregir la postura al dormir (hacerlo de lado y no boca arriba). Si el problema persiste, pueden probarse diversas prótesis dentales que desplazan la mandíbula hacia adelante para despejar el camino del aire. Si esto tampoco sirve queda la cirugía, la cual, explica un experto, "es efectiva en un 70% de los casos pero, en realidad, el ronquido persiste, aunque el sonido que perdura es menos molesto". Además, la radiofrecuencia o el bisturí, resultan dolorosas y pueden ocasionar algunos problemas, como cambios en la voz y alteraciones en la conducción de los fluidos de la boca y la nariz. Se trata de una cirugía mediana y tiene sus riesgos.
Si después de muchos intentos, los molestos ronquidos siguen perturbando el sueño del afectado es necesario evaluar la existencia de la apnea obstructiva, algo que suele ocurrir con frecuencia. Ésta se produce cuando los ronquidos sonoros son interrumpidos por episodios frecuentes de respiración totalmente obstruida. Los episodios serios duran más de diez segundos cada uno y ocurren más de siete veces por hora. El efecto inmediato de la apnea obstructiva del sueño es que quien ronca se ve forzado a dormir ligeramente y a tener sus músculos tensos para mantener la corriente de aire a los pulmones. Como no descansa bien, está somnoliento durante el día, perjudicando su desempeño tanto en el trabajo como en la vida personal. Después de varios años, este desorden puede producir alta presión sanguínea y ensanchamiento del corazón.
Diagnóstico y tratamiento
Los roncadores severos, aquellos quienes roncan en cualquier posición, deben consultar a un médico para asegurarse que no sea apnea el problema. Un otorrinolaringólogo realizará un examen completo de la nariz, boca, garganta, paladar y cuello. Puede ser necesario un estudio del sueño en un ambiente de laboratorio para determinar cuán serio es el problema y cuáles son los efectos en la salud.
http://www.publispain.com/revista/los-ronquidos-remedios-para-dejar-de-roncar.htm