Este mismo estudio revela que la compra de zapatos produce un efecto antidepresivo en las mujeres, lo que hace que eliminen ansiedad. Es una sensaciòn muy satisfactoria. hasta ahì, parece un gusto sano, el problema comienza cuando se convierte en obsesiòn, cuando influye en la economìa familiar o deja de hacer cosas importantes como trabajar o pasar tiempo con la pareja, por ir a comprar zapatos. Es entonces cuando hay que empezar a pensar que hemos pasado el limite de la vanidad al de un desorden mental.
Las adictas a los zapatos nunca tienen suficientes. Este es un fenòmeno reciente, que comenzò en el siglo XX. Este desorden suele estar acompañado del sìndrome de la "neofilia" u obsesiòn por lo nuevo. No se trata del placer de tener muchos zapatos, si no del gusto de comprarlos y tener algo nuevo.¿Dònde hay que empezar a preocuparse? Tener 20 pares de zapatos entran dentro de un estàndar normal, entre 30 y 40 pares podrìa llamarse vanidad femenina pero a partir de los 50 se puede decir que ya es una obsesiòn.
Entonces me quedarè en 49 siempre, tirarè los mas usaditos y traigo unos nuevos jijiji....