La doctora María Trinidad Herrero, catedrática de Anatomía Humana de la Universidad de Murcia, ha pronunciado una conferencia sobre “Las enfermedades neurodegenerativas y la edad” en el marco del XI ciclo del Aula Montpellier, en Zaragoza. En el transcurso de la misma analizó los principales factores que influyen en la aparición de patologías como el alzhéimer o el parkinson y explicó las últimas conclusiones de la investigación en este área.
Según Herrero, los factores que influyen en la aparición de las enfermedades neurodegenerativas son fundamentalmente tres: la predisposición genética, el ambiente y el envejecimiento fisiológico del paciente, dado que la mayor parte de los casos se producen en personas que han superado los 60 años de edad.
Para Herrero, “los distintos aspectos del envejecimiento humano conllevan la pérdida de plasticidad del cerebro y la afección a éste y a las funciones que realiza”, lo que unido a elementos ambientales y a la predisposición genética, “potencia la aparición de los primeros síntomas”.
La doctora Herrero hizo especial hincapié en los condicionantes ambientales de estas patologías, ya que “si nos exponemos a ellos es probable que se potencie la aparición de la enfermedad, pero si no lo hacemos jamás, ésta no tiene por qué aparecer”, aseguró.
Las investigaciones realizadas durante los últimos años están cada vez más cerca de demostrar que tanto el parkinson como el alzhémier, “las enfermedades” según Herrero, “forman parte de un mismo espectro de patologías en el que a veces predominan más unos síntomas que otros, y viceversa”. Por tanto, estaríamos ante “expresiones diferentes de posiblemente mecanismos patológicos similares”, un hecho que continúan investigando los expertos.
-Avances médicos
Otras conclusiones significativas que la doctora desgranó a lo largo de su intervención hicieron referencia a la naturaleza de las patologías y su futuro tratamiento. La investigadora del Departamento de Neurociencia clínica y experimental del Instituto de Envejecimiento de la Universidad de Murcia, destacó los resultados de su propia investigación, tales como “la inflamación cerebral acelera el envejecimiento y la progresión de estas enfermedades”.
Por otra parte, la doctora Herrero resaltó que “hasta hace poco se creía que cada enfermedad provocaba la alteración de unos núcleos determinados, y ahora se ha demostrado que son muchos”. También los estudios postmortem se han mostrado útiles para la investigación pero no para el tratamiento de la enfermedad. Para Herrero, “lo que realmente ayuda es estar al lado del enfermo y conocer sus síntomas”. A este respecto, señaló que la farmacogenética será en unos años una referencia en el tratamiento del espectro de enfermedades neurodegenerativas, “gracias a la elección de fármacos determinados según los síntomas que presente el paciente”.
*Publicado en "Médicos y pacientes"