Fachadas de piedra recuperadas, contraventanas en madera y colores pastel... Materiales rústicos impregnados de serenidad y frescura...
Hoy, echamos la vista atrás, y recordamos, con una vivienda de pueblo ubicada cerca de la preciosa ciudad de AVIGNON...
En esta ocasión, su propietario, un arquitecto belga seducido por la magia del sureste francés , comenzó prácticamente desde cero, convirtiendo una construcción casi en ruinas, en un espacio, que sin perder la esencia típicamente provenzal, guarda en su interior importantes tesoros contemporáneos...
Sin duda, una combinación DIEZ... El estilo de la zona combinado con tesoros, que brillan con luz propia y que no necesitan más compañía... Materiales preciosos que hermanan con lineas simples y huyen de la sobrecarga, recreando un ambiente claramente monacal... Una luz especial, que, sin duda es un elemento de peso en la decoración exterior...
Fuente Fotografías: Cote Maison
Un paraíso interior en un enclave paradisiaco... Que hoy os invitamos a recorrer con nosotros...
¡FELIZ SEMANA!