Esto que te digo te puede resultar muy lejano e incomprensible porque hay gente que nunca se detuvo a crear su vida. La fue viviendo a medida que los acontecimientos aparecían, respetando las fechas establecidas como importantes: fiestas anuales, cumpleaños, días de…
Sin embargo, también existe otra gente que vive a conciencia de su crecimiento y finitud y decide crear la vida que quiere para sí.
Vos… ¿En qué grupo estás?
¿Tenés un proyecto de vida?
¿Creés que podés crear la vida que querés?
Mucho más importante que lo que hicimos y por qué, es lo que estamos haciendo y para qué. Renny Yagosesky
Tener un proyecto de vida hace que tu vida –valga la redundancia- tenga un sentido, un para qué, algo por lo que levantarte cada mañana.
Mi interés en este post es transmitirte que quizás no sepas por qué estás deprimido, por qué te molesta que no salga el sol y llueva, cuánto ansiás que llegue el viernes y qué molesto y triste te ponen los domingos a la tarde, y todo esto te pasa quizás porque no tenés un proyecto de vida, algo que te permita estar permanentemente entusiasmado, tomar un paraguas y divertirte si te mojás y sentir que todos los días sean iguales de excitantes.
¿Cómo te sentís cuando hacés algo que sabés que tiene un sentido, un para qué?
¿Qué emociones te produce levantarte, desayunar, ir a trabajar, lidiar con el tráfico, recibir el maltrato de tu empleador, cansarte, discutir con la gente – que “¡Qué mal que está la gente!”- y volver a tu casa, comer e irte a dormir, día tras día, mes tras mes, año tras año?
La maravilla de la vida se nos escapa por la cómoda trampa de la rutina. John Nigro
¿Creés que esto te pasaría si tuvieras un meta clara relacionada con tu proyecto de vida, esa casa para tu familia, ese viaje de sueño, esa propia empresa, esa familia con valores donde cada uno es responsable de su propia vida porque aprendieron de vos que lo querés solo vos lo podés hacer?
Dejame ayudarte diciéndote que siempre que tenés un proyecto, la vida tiene otro color.
Cuando tenés un proyecto… de lo que sea… ¿Te importa qué día es, cómo está el tiempo, si es viernes o lunes?
Los grandes quiebres que sufrimos en la vida por diferentes motivos inherentes a todos los seres humanos: avance de la edad, problemas de salud, rupturas, pérdidas producen estados anímicos de los que a veces, parece que no se puede salir.
¡Probá a generar proyectos, uno tras otros, que el que termina por conseguirse dé paso al nacimiento de uno nuevo!
¿Cómo te parece que viven las personas que a los sesenta años deciden terminar su secundario?
¿Cómo te parece que se sienten las personas que a los setenta años deciden comenzar un negocio?
¿Son “raras”? ¿Están “locas”?
¿Sabés qué?
¡Tienen proyectos, jamás se sientes viejos, nunca se preocupan del sol o de la lluvia, tienen “para qué” en sus hermosas vidas!
Por eso…
Si no te estás sintiendo bien…
Si no tenés ganas de nada…
Si tu vida es todos los días más de lo mismo.
¡El proyecto de vida está esperando que lo hagas tu proyecto!
Tus creencias no están hechas de realidades, sino más bien es tu realidad la que está hecha de creencias. R. Bandler
Y no te estoy hablando de un Gran Proyecto, ese pertenece al mundo de tus Sueños y ocupa otro lugar, también importantísimo. Te estoy hablando del día a día, de la vida cotidiana, de las pequeñas cosas que cada día podés emprender para vivir la vida que merecés y no la del que solo espera que llegue a su fin (porque así será y hay que resignarse)
Nunca esperes que un Coach te diga lo que querés oír, para eso están los amigos. El Coach está para desafiarte, con todo respeto, para que abras tus ojos, mires con una mirada diferente y puedas creer en vos y en todo lo que podés hacer con tu vida.
Por el placer de compartir.