¿Pueden las relaciones íntimas mejorar la salud cardíaca?

Por Jesus Gutierrez @saludymedicina

A veces, las enfermedades cardíacas unen a las parejas, pero a menudo suponen un desafío para la relación y para ambos miembros. Con los años, hemos aprendido que los eventos cardíacos no solo le ocurren al paciente, sino también a la pareja.

Un artículo publicado en el Canadian Journal of Cardiology, pide que las parejas íntimas se incluyan en los programas de rehabilitación cardíaca para apoyar la salud cardíaca a largo plazo y la calidad de vida de ambos miembros de la pareja.

Una evaluación de la efectividad de las intervenciones basadas en parejas sobre factores de riesgo cardiovascular modificables, resultados cardíacos, salud mental y calidad de la relación en adultos con enfermedad cardíaca diagnosticada y sus parejas muestra que el 77% de los estudios revisados informan mejoras en el comportamiento de salud, con evidencia presentada tanto para resultados de salud cardíaca como mental.

La mayoría de la atención cardíaca se centra únicamente en el paciente individual, los programas para parejas, analizados en el artículo, buscan cambiar esta situación al involucrar a ambos miembros de la pareja en la recuperación y en los cambios de estilo de vida. Este enfoque reconoce que la pareja suele ser un factor clave en la recuperación, por ejemplo, al preparar comidas cardiosaludables, fomentar la actividad física regular y garantizar que la medicación se tome correctamente.

Los sistemas de salud priorizan cada vez más la atención centrada en el paciente y la familia. Los enfoques basados en la pareja podrían ayudar a los profesionales de la salud a brindar un mejor apoyo tanto a los pacientes como a sus parejas durante la rehabilitación cardíaca. No solo los pacientes recibirán intervenciones importantes para mejorar su salud, sino que sus parejas, que pueden tener factores de riesgo cardiovascular similares, también podrían beneficiarse.

Si bien existe una creciente evidencia de que estas intervenciones pueden mejorar los hábitos saludables, se sabe menos sobre cómo afectan el ajuste emocional o la calidad de la relación en sí. Los autores instan a que futuras investigaciones se centren más en los factores emocionales y relacionales para fortalecer la recuperación y el bienestar de ambos miembros de la pareja.

Los investigadores proponen un modelo de atención escalonada dentro de la rehabilitación cardíaca como una vía viable para la detección sistemática y la derivación a los servicios adecuados para ayudar a las parejas a afrontar la angustia. Para abordar las lagunas de conocimiento actuales, los estudios futuros deberían incluir poblaciones más diversas y medir los resultados tanto para los pacientes como para sus parejas.