Todos los objetos se realizan de manera completamente artesanal en Viveiro (Lugo), donde Oskar y Estela se conocieron trabajando en un hotel. Oskar, que venía de Pamplona a pasar la temporada trabajando, decidió quedarse allí y comenzar una nueva vida en Galicia. Hizo un curso de ebanistería y comenzó a trabajar la madera. Estela, cuya familia paterna es de Viveiro, decidió realizar el proyecto de fin de ciclo de Fotografía artística en el pueblo de su padre. Antes había estudiado Traducción e Interpretación en Madrid, donde ha vivido la mayor parte de su vida.
Estela siempre se ha interesado mucho por las técnicas para aplicar imagen sobre diversos soportes y materiales ya que considera que existe un gran campo aún por desarrollar en lo que se refiere a las relaciones poéticas y artísticas que pueden surgir de la combinación de fotografía con diversos materiales.
Juntos decidieron dar el paso de crear objetos singulares que pudiesen producir emociones especiales. Suelen trabajar con madera maciza de castaño y pino, aunque poco a poco quieren ir introduciendo más tipos, además de trabajar también con otros materiales.
Por primera vez mostraron su trabajo al público en abril del año pasado, en el Nómada Market. Allí es donde pudimos darnos cuenta de que nuestros sueños crecían gracias a las buenas palabras y el interés de las personas que admiraban nuestras piezas. Y decidimos que, aunque no resultase fácil al principio, pondríamos mucho empeño en continuar haciendo lo que nos llena.
Quieren que este proyecto no sea cuestión de modas pasajeras, si no que se convierta en nuestro modo de vivir, en el que interactúen las ideas del cliente, el diseño de carpintería y la fotografía. La idea inicial fue comenzar a hacer objetos relativamente pequeños que transmitiesen nuestro estilo, pero con el propósito de ir poco a poco realizando también proyectos de carpintería de mayor tamaño. En realidad, nuestro stand en las ferias muestra a la perfección el momento en el que nos encontramos: mucha variedad de objetos diversos que nos hacen sentir que no nos vamos a estancar en tres o cuatro diseños, si no que pretendemos presentar una marca que refleja nuestras propias inquietudes artísticas para seguir siendo fieles a nosotros mismos.
En sus trabajos suele haber una referencia directa con la naturaleza, ya que es parte fundamental de su inspiración.
En un principio, pensaron que la evolución de la marca sería lineal, aunque una vez que se embarcaron en este proyecto, han podido comprobar que el movimiento es mucho más “orgánico” que reducirlo a ventas y éxito. La evolución de Pura Garra dibuja una línea que a veces avanza, otras veces retrocede para dar algún que otro “rodeo” y se activa con impulsos personales, es decir, avanza como un ser vivo que busca la manera de crecer y mejorar de una manera natural y no impuesta. Concebirlo de esta forma resulta crucial si se pretende hacer algo que refleje gran parte de uno mismo, ya que exige respetar los propios pasos del proyecto y sus circunstancias.
Su filosofía a la hora de personalizar objetos es la de establecer un diálogo entre ellos y sus clientes con el fin de llegar a un objeto aún no pensado por ninguna de las partes.
Actualmente están muy ilusionados con los preparativos de la página web, donde se podrán ver sus creaciones, además de realizar encargos personalizados. De momento, podemos seguirlos en Facebook, aunque pronto empezarán a trabajar con nuevas redes sociales para dar a conocer sus trabajos.
La bisutería fue una gran sorpresa. Decidieron hacer unas cuantas formas de piezas de collares de madera para utilizar como soporte de imágenes antiguas y su aceptación está siendo muy buena. Por eso, esa parte de Pura Garra es quizás la que más fácilmente pueda verse a día de hoy en tiendas y locales. Cada pieza es concebida de forma única, ya que poco a poco van introduciendo nuevos elementos que juegan con la imagen. Son piezas muy ligeras y resistentes. Juegan con tachuelas, pan de oro y de plata, agujeros de taladro, abalorios, purpurinas, diferentes formas de lijar, tintes, fuego, flecos… no hay ninguna pieza exactamente igual a otra.
La luz es otro factor importante dentro del proyecto. Nos permite añadir funcionalidad y magia a las imágenes sobre madera.
La idea de permanecer en plena absorción de ideas y en continuo movimiento nos hace creer en futuras colaboraciones con otros diseñadores y artistas, que este mismo año ya empezarán a dar fruto. Nos interesa mucho hacer diseños propios con imágenes diferentes, pero nos encanta el concepto de carpintería a medida, en la que el cliente manifieste sus necesidades y gustos y nos permita reinterpretarlos para ofrecerle varias opciones.
El nombre de Pura Garra trata de reflejar precisamente todo esto: carácter, emoción, fuerza.
Tiendas en las que encontrar algunas de las creaciones de Pura Garra:
- Zlick, A Coruña
- La Intrusa Showroom, Madrid
- 99DesignersShop, Madrid
- Zoe, Madrid, Padilla 37
- Ruhna, Pamplona
- Chictrash Shop, Mercado de las Dalias, Ibiza