Acompañar la práctica de deporte con una buena alimentación es esencial para nuestra salud. Somos conscientes que antes de hacer ejercicio debemos alimentarnos correctamente y de forma saludable, esto es igual de importante una vez terminado nuestro ejercicio, también debemos comer alimentos precisos para que nuestro cuerpo se recupere correctamente.
Llevar un estilo de vida en el que la práctica de deporte sea clave es importante, de la misma manera que acompañarlo de una alimentación saludable y correcta, estos dos factores nos ayudarán conseguir un bienestar completo.
¿Qué comer antes de hacer ejercicio?
Antes de hacer ejercicio debemos preparar a nuestro organismo, y aportarle la energía suficiente para que seamos capaces de terminar con normalidad y sin hacer daño a nuestro cuerpo el ejercicio propuesto.
Debemos saber que nuestro sistema digestivo no necesita la misma energía que nuestro cuerpo para funcionar, necesita justo la mitad. Sabido esto, buscaremos alimentos que no requieran mucha energía para ser digeridos, de esta manera, nos quedará más energía para rendir correctamente en la actividad física que vamos a desarrollar.
Hidratos de carbono y proteínas
Tal y como hemos indicado antes, tenemos que buscar alimentos que sean fáciles de digerir. Tradicionalmente, la pasta o los cereales, son fuentes de hidratos de carbono, pero al mismo tiempo, para digerir correctamente estos alimentos, nuestro cuerpo necesita mucha energía, además de tiempo, entre unas dos a cuatro horas.
Así pues, como no queremos que nuestro cuerpo consuma nuestra energía en digerir los alimentos que hemos ingerido, porque necesitamos esta energía para la práctica de ejercicio físico, buscaremos alimentos que nos aporten la misma cantidad de energía o parecida pero que sean más fáciles de digerir.
La mejor opción para cumplir con nuestro cometido serán los vegetales, más concretamente de hojas verdes, las frutas dulces y también aquellas verduras que sean ricas en almidón. Una buena forma de consumir este tipo de alimentos es mediante la elaboración de un batido, los conocidos como batidos verdes. Estas recetas serán una buena fuente de nutrición para nuestro organismo y permitirán que nuestro cuerpo obtenga la energía que necesita de forma gradual. Aunque esta es una forma fácil y sencilla de ingerir todos los alimentos necesarios, también podemos comer la verdura y la fruta enteras.
Las proteínas también son una gran fuente de energía y una buena elección para cargar pilas antes de hacer deporte. De la misma forma que ocurre con los hidratos de carbono, también hay alimentos ricos en proteínas que nuestro organismo absorbe con mayor facilidad y utilizando menos energía.
En este caso, las proteínas de origen animal, es verdad que nos aportan todo lo necesario para crear la proteína humana, pero es más difícil de absorber para nuestro organismo. Si elegimos proteína vegetal, nuestro cuerpo recibirá las proteínas más limpias y las podrá absorber con mayor facilidad.
Si lo que queremos conseguir con la actividad física es musculatura, debemos nutrir a nuestro organismo con proteínas, tanto esenciales como no esenciales, para ello, podemos ingerir un gran abanico de alimentos vegetales, como los cereales, las semillas, los frutos secos o las legumbres, entre muchos otros.
Receta de batido verde para antes de hacer ejercicio
Pues bien, una de las opciones que podemos elegir para antes de hacer deporte es un buen batido verde que nos aporte mucha energía y a la vez nos ayude a perder grasas y definir musculatura.
Ingredientes:
- 2 rodajas de melón
- Menta fresca
- Espinacas frescas
- ½ mango
- ¼ pepino
- 2 manzanas verdes
Elaboración: una vez tenemos todos los ingredientes, limpia, trocea, licua y… ¡listo para servir!
¿Qué comer después de hacer ejercicio?
Una vez terminamos de hacer ejercicio, nuestro cuerpo necesita de nuevo energía e hidratación, que debemos aportarle en forma de alimentos y agua.
Si hemos realizado un ejercicio de “cardio”, con intensidad y duración, nuestros depósitos de hidratos de carbono, que son los que aportan energía a nuestro cuerpo y músculos, estarán vacíos a causa del esfuerzo. Además, también hemos consumido durante el ejercicio físico proteína.
Para recuperarnos de esta pérdida de energía y proteína que ha sufrido nuestro organismo con la actividad física debemos aportarle de nuevo lo que le falta a nuestro cuerpo, podemos hacerlo en forma de alimentos, que aporten hidratos de carbono y proteína.
Necesitamos reparar y recargar nuestro cuerpo, esto lo conseguiremos con alimentos muy ricos en hidratos de carbono y que sean fáciles de asimilar para el organismo. Algunos alimentos perfectos para estos casos son las frutas, cereales, arroz, patatas o galletas y alimentos dulces como pasas, ciruelas u orejones. Estos alimentos aportarán la energía que le falta a nuestro cuerpo.
Además, también hemos perdido proteína, por ello incluiremos también alimentos como la leche, el queso, los huevo o el yogurt, que nos ayudarán a reparar nuestro músculos después del ejercicio.
Hay que recordar que, aunque hayamos realizado ejercicio físico no significa que podamos comer de todo y en grandes cantidades para recuperar energía. Debemos tener en cuenta que ingerimos dependiendo de la energía que hemos utilizado durante el entrenamiento. Es importante evitar alimentos grasos y poco sanos.
Aunque es importante comer después de la actividad física, hay que recordar siempre que una nutrición adecuada nos ayudará a mantener nuestro cuerpo sano.
Aperitivo para después de hacer ejercicio
- Para ganar músculo: además de hidratar con mucha agua nuestro organismo, si queremos ganar músculo, los ingredientes ideales para después de hacer ejercicio serán proteínas fáciles de digerir y un poco de azúcar. Por ejemplo: un vaso de leche y un plátano, leche con cacao, un zumo de naranja con miel, un yogurt con avena o un vaso de leche y orejones o uvas pasas.
- Para quemar grasas: el principal objetivo es rehidratar nuestro cuerpo, por ello debemos beber abundante agua, y si nuestro objetivo es quemar grasas es aconsejable no consumir alimentos sólidos inmediatamente después del esfuerzo. Por ejemplo: una manzana, un yogurt con fruta, un vaso de leche con frutos secos como nueces o almendras, un vaso de leche con avena o medio bocadillo con pan integral, queso fresco y tomate.